Oh SEÑOR, Dios de las venganzas, Oh Dios de las venganzas, ¡resplandece!
(Salmos 94:1)Levántate, Juez de la tierra; Da su merecido a los soberbios.
(Salmos 94:2)¿Hasta cuándo los impíos, SEÑOR, Hasta cuándo los impíos se regocijarán?
(Salmos 94:3)Charlan, hablan con arrogancia; Todos los que hacen iniquidad se vanaglorían.
Aplastan a Tu pueblo, SEÑOR, Y afligen a Tu heredad.
(Salmos 94:5)Matan a la viuda y al extranjero, Y asesinan a los huérfanos.
(Salmos 94:6)Y dicen: "El SEÑOR no ve nada Ni hace caso el Dios de Jacob."
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Salmos 94:4 - Referencia Cruzada
Entonces yo seguí mirando a causa del ruido de las palabras arrogantes que el cuerno decía. Seguí mirando hasta que mataron a la bestia, destrozaron su cuerpo y lo echaron a las llamas del fuego.
(Daniel 7:11)Que afilan su lengua como espada, Y lanzan palabras amargas como flecha,
(Salmos 64:3)A la bestia se le dio una boca que hablaba palabras arrogantes y blasfemias, y se le dio autoridad para actuar durante cuarenta y dos meses.
(Apocalipsis 13:5)Por mano de tus siervos has injuriado al Señor, Y has dicho: 'Con mis numerosos carros Yo subí a las cumbres de los montes, A las partes más lejanas del Líbano, Y corté sus altos cedros y sus mejores cipreses. Iré a su más alta cima, a su más frondoso bosque.
(Isaías 37:24)Y dicen a Dios: '¡Apártate de nosotros! No deseamos el conocimiento de Tus caminos.
(Job 21:14)Mientras yo contemplaba los cuernos, vi que otro cuerno, uno pequeño, surgió entre ellos, y tres de los primeros cuernos fueron arrancados delante de él. Y este cuerno tenía ojos como los ojos de un hombre y una boca que hablaba con mucha arrogancia.
(Daniel 7:8)¡Camada de víboras! ¿Cómo pueden hablar cosas buenas siendo malos? Porque de la abundancia del corazón habla la boca.
(Mateo 12:34)Para el director del coro. Masquil de David, cuando fue Doeg el Edomita e informó a Saúl, diciéndole: "David está en casa de Ahimelec." ¿Por qué te glorías del mal, oh poderoso? La misericordia de Dios es constante.
(Salmos 52:1)Mira, echan espuma por la boca; Hay espadas en sus labios, Pues dicen: "¿Quién oye?"
(Salmos 59:7)El rey hará lo que le plazca, se enaltecerá y se engrandecerá sobre todo dios, y contra el Dios de los dioses dirá cosas horrendas. El prosperará hasta que se haya acabado la indignación, porque lo que está decretado se cumplirá.
(Daniel 11:36)Enmudezcan los labios mentirosos, Porque hablan arrogantes contra el justo Con soberbia y desprecio.
(Salmos 31:18)El proferirá palabras contra el Altísimo y afligirá a los santos del Altísimo, e intentará cambiar los tiempos y la ley. Y le serán entregados en sus manos por tres años y medio (un tiempo, tiempos y medio tiempo).
(Daniel 7:25)Se burlan, y con maldad hablan de opresión; Hablan desde su encumbrada posición.
(Salmos 73:8)Con arrogancia el impío acosa al afligido; ¡Que sea atrapado en las trampas que ha preparado!
(Salmos 10:2)El enemigo dijo: 'Perseguiré, alcanzaré, repartiré el despojo; Se cumplirá mi deseo contra ellos; Sacaré mi espada, los destruirá mi mano.'
(Éxodo 15:9)Porque ha dicho: "Con el poder de mi mano lo hice, Y con mi sabiduría, pues tengo entendimiento. Quité las fronteras de los pueblos, Saqueé sus tesoros, Y como hombre fuerte abatí a sus habitantes.
(Isaías 10:13)Entonces dijeron: "Vengan y tramemos planes contra Jeremías. Ciertamente la ley no le faltará al sacerdote, ni el consejo al sabio, ni la palabra al profeta. Vengan, vamos a herirlo con la lengua, y no hagamos caso a ninguna de sus palabras."
(Jeremías 18:18)Aguzan su lengua como serpiente; Veneno de víbora hay bajo sus labios. (Selah)
(Salmos 140:3)Por el pecado de su boca y la palabra de sus labios, Sean presos en su orgullo, Y a causa de las maldiciones y mentiras que profieren.
(Salmos 59:12)Hay gente cuyos dientes son espadas, Y sus muelas cuchillos, Para devorar a los pobres de la tierra, Y a los menesterosos de entre los hombres.
(Proverbios 30:14)Se engrandeció hasta igualarse con el Jefe del ejército, le quitó Su sacrificio continuo y fue derribado el lugar de Su santuario.
(Daniel 8:11)De éstos también profetizó Enoc, en la séptima generación desde Adán, diciendo: "El Señor vino con muchos millares de Sus santos,
(Judas 1:14)Pero cuando los Fariseos lo oyeron, dijeron: "Este no expulsa los demonios sino por Beelzebú, el príncipe de los demonios."
(Mateo 12:24)