Nueva Biblia Latinoamericana
Líbrame de todas mis transgresiones; No me hagas la burla de los necios. (Salmos 39:8)
Mudo me he quedado, no abro la boca, Porque Tú eres el que ha obrado. (Salmos 39:9)
Quita de mí Tu plaga; Por la dureza de Tu mano estoy pereciendo. (Salmos 39:10)
Con castigos reprendes al hombre por su iniquidad; Como la polilla, consumes lo que es más precioso para él. Ciertamente, todo hombre es sólo un soplo. (Selah)
Escucha mi oración, oh SEÑOR, y presta oído a mi clamor; No guardes silencio ante mis lágrimas; Porque extranjero soy junto a Ti, Peregrino, como todos mis padres. (Salmos 39:12)
Aparta de mí Tu mirada, para poder alegrarme Antes de que me vaya de aquí y ya no exista." (Salmos 39:13)
Para el director del coro. Salmo de David. Esperé pacientemente al SEÑOR, Y El se inclinó a mí y oyó mi clamor. (Salmos 40:1)

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Salmos 39:11 - Referencia Cruzada

Mientras me deshago como cosa podrida, Como vestido comido de polilla. (Job 13:28)
Yo reprendo y disciplino a todos los que amo. Sé, pues, celoso y arrepiéntete. (Apocalipsis 3:19)
pero fue reprendido por su transgresión, pues una muda bestia de carga, hablando con voz humana, reprimió la locura del profeta. (2 Pedro 2:16)
Por esta razón hay muchos débiles y enfermos entre ustedes, y muchos duermen (han muerto). (1 Corintios 11:30)
Si el Señor DIOS Me ayuda; ¿Quién es el que Me condena? Todos ellos como un vestido se gastarán, La polilla se los comerá. (Isaías 50:9)
Porque hemos sido consumidos con Tu ira, Y por Tu furor hemos sido conturbados. (Salmos 90:7)
Salmo de David. Para conmemorar. SEÑOR, no me reprendas en Tu enojo, Ni me castigues en Tu furor. (Salmos 38:1)
PORQUE EL SEÑOR AL QUE AMA, DISCIPLINA, Y AZOTA A TODO EL QUE RECIBE POR HIJO." (Hebreos 12:6)
Mi piel se ennegrece sobre mí, Y mis huesos se queman por la fiebre. (Job 30:30)
A causa de Tu indignación y de Tu enojo; Pues Tú me has levantado y me has rechazado. (Salmos 102:10)
Yo, pues, soy como polilla para Efraín, Y como carcoma para la casa de Judá. (Oseas 5:12)
¡Cuánto más a los que habitan en casas de barro, Cuyos cimientos están en el polvo, Que son aplastados como la polilla! (Job 4:19)
entreguen a ese tal a Satanás para la destrucción de su carne, a fin de que su espíritu sea salvo en el día del Señor Jesús. (1 Corintios 5:5)