Nueva Biblia Latinoamericana
Guárdame como a la niña de Tus ojos; Escóndeme a la sombra de Tus alas (Salmos 17:8)
De los impíos que me despojan, De mis enemigos mortales que me rodean. (Salmos 17:9)
Han cerrado su insensible corazón ; Hablan arrogantemente con su boca. (Salmos 17:10)
Ahora han cercado nuestros pasos; Fijan sus ojos para echarnos por tierra,
Como león que ansía despedazar, Como leoncillo que acecha en los escondites. (Salmos 17:12)
Levántate, SEÑOR, sal a su encuentro, derríbalo; Con Tu espada libra mi alma del impío. (Salmos 17:13)
Líbrame de los hombres, con Tu mano, oh SEÑOR, De los hombres del mundo, cuya herencia está en esta vida, Y cuyo vientre llenas de Tu tesoro. Se llenan de hijos, Y dejan lo que les abunda a sus pequeños. (Salmos 17:14)

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Salmos 17:11 - Referencia Cruzada

Se sienta al acecho en las aldeas, En los escondrijos mata al inocente; Sus ojos espían al desvalido. (Salmos 10:8)
Entonces Saúl tomó de todo Israel 3,000 hombres escogidos, y fue en busca de David y de sus hombres por los peñascos de las cabras monteses. (1 Samuel 24:2)
Saúl iba por un lado del monte y David y sus hombres por el otro lado del monte. David se apresuraba para huir de Saúl, pues Saúl y sus hombres estaban rodeando a David y a sus hombres para apresarlos. (1 Samuel 23:26)
Me han rodeado como aguas todo el día; A una me han cercado. (Salmos 88:17)
Se levantó, pues, Saúl y descendió al desierto de Zif, teniendo consigo 3,000 hombres escogidos de Israel, para buscar a David en el desierto de Zif. (1 Samuel 26:2)
Los impíos han sacado la espada y entesado el arco Para abatir al afligido y al necesitado, Para matar a los de recto proceder. (Salmos 37:14)
El que guiña los ojos, el que hace señas con los pies, El que señala con los dedos, (Proverbios 6:13)