Si El arrebatara algo, ¿quién Lo impediría? Quién podrá decirle: '¿Qué haces?'
(Job 9:12)Dios no retirará Su ira; Debajo de El quedan humillados los que ayudan al Rahab (monstruo marino).
(Job 9:13)¿Cómo puedo yo responderle, Y escoger mis palabras delante de El?
(Job 9:14)Porque aunque yo tuviera razón, no podría responder; Tendría que implorar la misericordia de mi Juez.
Si yo llamara y El me respondiera, No podría creer que escuchara mi voz.
(Job 9:16)Porque El me quebranta con tempestad, Y sin causa multiplica mis heridas.
(Job 9:17)No me permite cobrar aliento, Sino que me llena de amarguras.
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Job 9:15 - Referencia Cruzada
Y cuando oró a El, Dios se conmovió por su ruego, oyó su súplica y lo trajo de nuevo a Jerusalén, a su reino. Entonces Manasés reconoció que el SEÑOR era Dios.
(2 Crónicas 33:13)Si tú buscaras a Dios E imploraras la misericordia del Todopoderoso,
(Job 8:5)Allí el justo razonaría con El, Y yo sería librado para siempre de mi Juez.
(Job 23:7)Le diré a Dios: 'No me condenes, Hazme saber que tienes contra mí.
(Job 10:2)Orarás a El y te escuchará, Y cumplirás tus votos.
(Job 22:27)Porque ¿ha dicho alguien a Dios: 'He sufrido castigo, Ya no ofenderé más;
(Job 34:31)y quien cuando Lo ultrajaban, no respondía ultrajando. Cuando padecía, no amenazaba, sino que se encomendaba a Aquél que juzga con justicia.
(1 Pedro 2:23)Pero en cuanto a mí, yo buscaría a Dios, Y delante de Dios presentaría mi causa;
(Job 5:8)Con llanto vendrán, Y entre súplicas los guiaré. Los haré andar junto a arroyos de aguas, Por camino derecho en el cual no tropezarán; Porque soy un padre para Israel, Y Efraín es Mi primogénito."
(Jeremías 31:9)Volví mi rostro a Dios el Señor para buscarlo en oración y súplicas, en ayuno, cilicio y ceniza.
(Daniel 9:3)Si soy malvado, ¡ay de mí!, Y si soy justo, no me atrevo a levantar la cabeza. Estoy lleno de deshonra y consciente de mi aflicción.
(Job 10:15)toda oración o toda súplica que sea hecha por cualquier hombre o por todo Tu pueblo Israel, conociendo cada cual la aflicción de su corazón, y extendiendo sus manos hacia esta casa;
(1 Reyes 8:38)Inclina Tu oído, Dios mío, y escucha. Abre Tus ojos y mira nuestras desolaciones y la ciudad sobre la cual se invoca Tu nombre. Pues no es por nuestros propios méritos que presentamos nuestras súplicas delante de Ti, sino por Tu gran compasión.
(Daniel 9:18)Porque no estoy consciente de nada en contra mía. Pero no por eso estoy sin culpa, pues el que me juzga es el Señor.
(1 Corintios 4:4)