Y el SEÑOR dijo a Satanás: "¿Te has fijado en Mi siervo Job? Porque no hay ninguno como él sobre la tierra; es un hombre intachable (íntegro) y recto, temeroso de Dios y apartado del mal."
(Job 1:8)
Satanás respondió al SEÑOR: "¿Acaso teme Job a Dios de balde?
(Job 1:9)
¿No has hecho Tú una valla alrededor de él, de su casa y de todo lo que tiene, por todos lados? Has bendecido el trabajo de sus manos y sus posesiones han aumentado en la tierra.
(Job 1:10)
Pero extiende ahora Tu mano y toca todo lo que tiene, y verás si no Te maldice en Tu misma cara."
Entonces el SEÑOR dijo a Satanás: "Todo lo que él tiene está en tu poder; pero no extiendas tu mano sobre él." Y Satanás salió de la presencia del SEÑOR.
(Job 1:12)
Y aconteció que un día en que los hijos y las hijas de Job estaban comiendo y bebiendo en la casa del hermano mayor,
(Job 1:13)
vino un mensajero a Job y le dijo: "Los bueyes estaban arando y las asnas paciendo junto a ellos,
(Job 1:14)
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Job 1:11 - Referencia Cruzada
Entonces el SEÑOR dijo a Satanás: "Todo lo que él tiene está en tu poder; pero no extiendas tu mano sobre él." Y Satanás salió de la presencia del SEÑOR.
(Job 1:12)
y dijo: "Desnudo salí del vientre de mi madre Y desnudo volveré allá. El SEÑOR dio y el SEÑOR quitó; Bendito sea el nombre del SEÑOR."
(Job 1:21)
Pero ahora que te ha llegado a ti, te impacientas; Te toca a ti, y te desalientas.
(Job 4:5)
Entonces su mujer le dijo: "¿Aún conservas tu integridad? Maldice a Dios y muérete."
(Job 2:9)
No toquen a Mis ungidos, Ni hagan mal a Mis profetas."
(Salmos 105:15)
Y pasarán por la tierra oprimidos y hambrientos. Y sucederá que cuando tengan hambre, se enojarán y maldecirán a su rey y a su Dios, volviendo el rostro hacia arriba.
(Isaías 8:21)
Y los hombres fueron quemados con el intenso calor. Blasfemaron el nombre de Dios que tiene poder sobre estas plagas, y no se arrepintieron para darle gloria a El.
(Apocalipsis 16:9)
Tengan piedad, tengan piedad de mí, ustedes mis amigos, Porque la mano de Dios me ha herido.
(Job 19:21)
Por esta causa se ha encendido la ira del SEÑOR contra Su pueblo, Y ha extendido Su mano contra ellos y los ha herido. Los montes temblaron y sus cadáveres yacen como desecho en medio de las calles. Con todo esto, no se ha agotado Su ira, Y aún está extendida Su mano.
(Isaías 5:25)
Las palabras de ustedes han sido duras contra Mí," dice el SEÑOR. Pero dicen: '¿Qué hemos hablado contra Ti?'
(Malaquías 3:13)
Abimelec ordenó a todo el pueblo: "El que toque a este hombre o a su mujer, de cierto morirá."
(Génesis 26:11)
Enormes granizos, como de 45 kilos cada uno, cayeron sobre los hombres. Y los hombres blasfemaron contra Dios por la plaga del granizo, porque esa plaga fue sumamente grande.
(Apocalipsis 16:21)
Blasfemaron contra el Dios del cielo por causa de sus dolores y de sus llagas, y no se arrepintieron de sus obras.
(Apocalipsis 16:11)
Sin embargo, extiende ahora Tu mano y toca su hueso y su carne, verás si no Te maldice en Tu misma cara."
(Job 2:5)
Porque así dice el SEÑOR de los ejércitos, cuya gloria me ha enviado contra las naciones que los despojaron, porque el que los toca, toca la niña de Su ojo:
(Zacarías 2:8)
Cuando los días del banquete habían pasado, Job enviaba a buscarlos y los santificaba, y levantándose temprano, ofrecía holocaustos conforme al número de todos ellos. Porque Job decía: "Quizá mis hijos hayan pecado y maldecido a Dios en sus corazones." Job siempre hacía así.
(Job 1:5)