También los hijos de Judá capturaron vivos a 10,000 y los llevaron a la cumbre de la peña, los echaron abajo desde la cumbre de la peña y todos fueron despedazados.
(2 Crónicas 25:12)Pero las tropas que Amasías había hecho volver para que no fueran con él a la batalla, saquearon las ciudades de Judá desde Samaria hasta Bet Horón, mataron a 3,000 de ellos y tomaron mucho botín.
(2 Crónicas 25:13)Después que Amasías regresó de la matanza de los Edomitas, trajo los dioses de los hijos de Seir y los puso como sus dioses, se postró delante de ellos y les quemó incienso.
(2 Crónicas 25:14)Entonces se encendió la ira del SEÑOR contra Amasías, y le envió un profeta que le dijo: "¿Por qué has buscado a los dioses de otro pueblo que no pudieron librar a su propio pueblo de tu mano?"
Y mientras el profeta hablaba con él, el rey le dijo: "¿Acaso te hemos constituido consejero real? Detente. ¿Por qué buscas que te maten?" Entonces el profeta se detuvo, y dijo: "Yo sé que Dios ha determinado destruirte, porque has hecho esto y no has escuchado mi consejo."
(2 Crónicas 25:16)Entonces Amasías, rey de Judá, tomó consejo y envió mensajeros a Joás, hijo de Joacaz, hijo de Jehú, rey de Israel, y le dijeron: "Ven, veámonos cara a cara."
(2 Crónicas 25:17)Joás, rey de Israel, envió este mensaje a Amasías, rey de Judá: "El cardo que estaba en el Líbano, envió a decir al cedro que estaba en el Líbano: 'Da a tu hija por mujer a mi hijo.' Pero pasó una fiera que estaba en el Líbano, y pisoteó el cardo.
(2 Crónicas 25:18)Otras publicaciones relacionadas con "2 Crónicas 25:15":
2 Crónicas 25:15 - Referencia Cruzada
Entonces el Espíritu de Dios vino sobre Zacarías, hijo del sacerdote Joiada. El se puso en pie, en un lugar más alto que el pueblo, y les dijo: "Así ha dicho Dios: '¿Por qué quebrantan ustedes los mandamientos del SEÑOR y no prosperan ? Por haber abandonado al SEÑOR, El también los ha abandonado.'"
(2 Crónicas 24:20)En ese tiempo el vidente Hananí vino a Asa, rey de Judá, y le dijo: "Por cuanto te has apoyado en el rey de Aram y no te has apoyado en el SEÑOR tu Dios, por eso el ejército del rey de Aram ha escapado de tu mano.
(2 Crónicas 16:7)y en cuanto a ustedes, no harán pacto con los habitantes de esta tierra; sus altares derribarán.' Pero no Me han obedecido. ¿Qué es esto que han hecho?
(Jueces 2:2)Los ídolos de ellos son plata y oro, Obra de manos de hombre.
(Salmos 115:4)Por tanto, en cuanto a comer de lo sacrificado a los ídolos, sabemos que un ídolo no es nada (no tiene verdadera existencia) en el mundo, y que no hay sino un solo Dios.
(1 Corintios 8:4)No, sino que digo que lo que los Gentiles sacrifican, lo sacrifican a los demonios y no a Dios; no quiero que ustedes sean partícipes con los demonios.
(1 Corintios 10:20)Pero el vidente Jehú, hijo de Hananí, salió a encontrarlo y dijo al rey Josafat: "¿Vas a ayudar al impío y amar a los que odian al SEÑOR, y con esto traer sobre ti la ira del SEÑOR?
(2 Crónicas 19:2)¿Quién no Te temerá, oh Rey de las naciones? Porque esto se Te debe. Porque entre todos los sabios de las naciones, Y en todos sus reinos, No hay nadie como Tú.
(Jeremías 10:7)Se ha postrado Bel, se derrumba Nebo; Sus imágenes son puestas sobre bestias, sobre animales de carga. Sus bultos son pesados, Una carga agobiadora para la bestia fatigada.
(Isaías 46:1)Amasías se fortaleció, y al frente de su pueblo fue al Valle de la Sal y mató a 10,000 de los hijos de Seir.
(2 Crónicas 25:11)Así dice el SEÑOR: "¿Qué injusticia hallaron en Mí sus padres, Para que se alejaran de Mí Y anduvieran tras lo vano y se hicieran vanos?
(Jeremías 2:5)Entonces Eliezer, hijo de Dodava de Maresa, profetizó contra Josafat: "Por cuanto te has aliado con Ocozías, el SEÑOR ha destruido tus obras." Así que las naves fueron destruidas y no pudieron ir a Tarsis.
(2 Crónicas 20:37)Pero un hombre de Dios vino a Amasías y le dijo: "Oh rey, no permita que el ejército de Israel vaya con usted, porque el SEÑOR no está con Israel ni con ninguno de los hijos de Efraín.
(2 Crónicas 25:7)Entonces el SEÑOR envió a Natán a David. Y Natán vino a él y le dijo: "Había dos hombres en una ciudad, el uno rico, y el otro pobre.
(2 Samuel 12:1)Todos los que dan forma a un ídolo son nada, y sus cosas más preciadas de nada sirven. Aun sus propios testigos no ven ni entienden, por eso serán avergonzados.
(Isaías 44:9)Porque todos los dioses de los pueblos son ídolos, Pero el SEÑOR hizo los cielos.
(Salmos 96:5)