Nueva Biblia Latinoamericana
Al ver su escudero que Saúl había muerto, él también se echó sobre su espada y murió. (1 Crónicas 10:5)
Así murió Saúl con sus tres hijos, y todos los de su casa murieron junto con él. (1 Crónicas 10:6)
Cuando todos los hombres de Israel que vivían en el valle, vieron que los suyos habían huido y que Saúl y sus hijos habían muerto, abandonaron sus ciudades y huyeron; entonces los Filisteos vinieron y habitaron en ellas. (1 Crónicas 10:7)
Al día siguiente, cuando los Filisteos vinieron para despojar a los muertos, hallaron a Saúl y a sus hijos caídos en el Monte Gilboa.
Lo despojaron, tomaron su cabeza y sus armas y enviaron mensajeros por toda la tierra de los Filisteos para que llevaran las buenas nuevas a sus ídolos y al pueblo. (1 Crónicas 10:9)
Pusieron su armadura en la casa de sus dioses y clavaron su cabeza en la casa de Dagón. (1 Crónicas 10:10)
Cuando los de Jabes de Galaad oyeron todo lo que los Filisteos habían hecho a Saúl, (1 Crónicas 10:11)

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1 Crónicas 10:8 - Referencia Cruzada

Entonces dijeron: "Esto es sangre; sin duda los reyes han peleado entre sí, y se han matado unos a otros. Ahora pues, ¡Moab, al despojo!" (2 Reyes 3:23)
Al llegar Josafat y su pueblo para recoger el botín, hallaron mucho entre los cadáveres, incluyendo mercaderías, vestidos y objetos preciosos que tomaron para sí, más de los que podían llevar. Estuvieron tres días recogiendo el botín, pues había mucho. (2 Crónicas 20:25)
Al día siguiente, cuando vinieron los Filisteos a despojar a los muertos, hallaron a Saúl y a sus tres hijos caídos en el Monte Gilboa. (1 Samuel 31:8)