Fe radical que rompe hielo
Dr. Roberto Miranda(Audio: Español)
RESUMEN:
En este sermón, el pastor habla sobre la importancia de la fe y cómo se puede adquirir a través de la lectura de la Palabra de Dios, la oración, el ayuno, el servicio al Señor y el codearse con otros hombres y mujeres de fe. Luego, el pastor se enfoca en el personaje bíblico de Bartimeo, el ciego, y cómo él ejemplifica la fe al tomar riesgos, vencer obstáculos, actuar desesperadamente, cometer lo improbable y emprender acción. El pastor también comparte una lección personal sobre cómo siempre hay una solución en la vida si uno tiene fe en Dios y no se deja llevar por las emociones.
El sermón habla sobre la importancia de ser una persona de fe y emprendedora. Se enfoca en el principio de la fe y cómo la gente de fe es esforzada y valiente. También se habla sobre la naturaleza del reino de Dios y cómo debemos ajustarnos a ella. Se discute un pasaje de la Biblia que habla sobre el reino de los cielos y cómo sufre violencia, pero se explica que en realidad el reino de los cielos es violento en contra del reino de las tinieblas, y que cuando Cristo entró al mundo, inició una lucha de poder para reconquistar lo que le pertenecía.
El reino de los cielos no es para la gente tibia, sino para los decididos, fuertes y valientes. Dios quiere cambiar nuestra genética y darnos el programa del reino de los cielos. Debemos ser como Bartimeo, un ciego que arrojó su capa y corrió hacia Jesús. Debemos dejar atrás las cosas que nos dan seguridad y seguir a Jesús según los valores y principios del reino de Dios. Dios quiere hacer de nosotros gente decidida, poderosa, evangelística y de santidad
La oración pide a Dios que haga de la iglesia una congregación poderosa, evangelística, adoradora, de fe y santidad. La persona que ora declara que la iglesia será un fuerte del reino de Dios y un destacamento para su gloria. Luego se anima a los hermanos a bendecirse mutuamente y declarar el poder de Dios sobre sus vidas. La oración termina con la bendición del Señor.Vamos a Marcos, capítulo 10, vamos a ir a los versículos 46 al 52 y, de nuevo, estamos centrándonos en el tema de qué… ¿qué tema estamos tratando, vamos a ver? En estos días… ¿qué tema? Díganlo todos: fe.
Okay. Yo espero, hermanos, que a través de nuestras meditaciones, a través de nuestros sermones, ese concepto de la fe y no solamente un concepto, es una dinámica… es un principio espiritual poderosos que se grabe en nuestros corazones. Yo quiero que ustedes vayan meditando. Yo estoy tratando de ser, por lo menos un poco sistemático en lo que estoy enseñando, y quizás algunos de ustedes van a poder ir al Internet y escuchar de nuevo estos sermones para que se les grabe bien en el corazón y que usted pueda ir adquiriendo esos conocimientos que son tan necesarios para vivir una vida victoriosa.