Después del milagro - la persecución
Dr. Roberto Miranda(Audio: Español)
RESUMEN:
El Capítulo 4 de los Hechos habla de la persecución que se desata cuando Pedro y Juan hacen la obra del Señor y movilizan el Espíritu Santo a favor de un paralítico. Después de la bendición y el milagro, viene la persecución. La ira del enemigo se desata cuando el Evangelio progresa, dondequiera que la gente se esté convirtiendo, dondequiera que la palabra de Dios está siendo anunciada con claridad, el Espíritu Santo se esté moviendo. El diablo no quiere una iglesia adormecida, quiere un sistema religioso que mate la fe. El Reino de los cielos avanza con violencia y los violentos son los que lo arrebatan. Los cristianos deben adoptar la mentalidad de Cristo, vivir para Dios y tener una mentalidad de guerra contra el reino de las tinieblas. En el libro de los Hechos, cuando el Evangelio está más poderoso, viene el ataque del diablo inmediatamente. Pero un pueblo de Dios que vive para Cristo, nada lo puede separar
El autor habla sobre la importancia de adoptar una mentalidad guerrera y estar dispuestos a padecer persecución por Cristo. La iglesia moderna en muchos lugares ha perdido esta mentalidad de separación y oposición al mundo y esto ha afectado su efectividad y poder espiritual. El autor anima a los creyentes a vivir una vida para el Reino de Dios y no apegarse al mundo ni poner su lealtad en él. También señala que los que se oponen a la predicación del Evangelio son los que no quieren que se predique un Evangelio lleno de vida y liberación. La casta directiva de Israel se abalanza contra los discípulos porque sienten que sus intereses están siendo amenazados, y así pasará siempre. Finalmente, el autor destaca la importancia de mantenerse firmes y vigilantes en medio de la guerra espiritual.
El predicador habla sobre la importancia de entender que la vida cristiana se mueve con poder y autoridad, y que esto se consigue a través del apego a Jesucristo y la entrega total a Él. La iglesia debe cultivar la mentalidad de un guerrero del Reino que busca acumular poder y autoridad a través de la oración, el ayuno y la lectura de la Palabra de Dios. El predicador enfatiza que para ser un instrumento de Dios, hay que pagar el precio y adoptar la mentalidad correcta. El pueblo de Dios debe estar listo para la batalla y acumular poder y autoridad en el nombre de Jesús. Finalmente, la oración es ofrecida para que la iglesia reciba una mentalidad guerrera y se llene del poder de Dios.
El mensaje es sobre la importancia de tener una mentalidad de guerrero y una lealtad exclusiva a Cristo Jesús y su reino. Se pide a Dios que cambie a la iglesia y que llene cada área de nuestras vidas para ser instrumentos en sus manos. También se declara ser mártires y estar dispuestos a morir por Cristo si es necesario. Todo se hace en el poder y la autoridad del nombre de Jesús.Capítulo 4, libro de los Hechos, voy a leer solamente los primeros 3, 4 versículos y después seguiremos tratando con lo demás: “… Hablando ellos al pueblo vinieron sobre ellos los sacerdotes con el jefe de la guardia del templo y los saduceos resentidos de que enseñasen al pueblo y anunciasen en Jesús – marque eso en Jesús- la resurrección de entre los muertos…”
What’s wrong with that? Como diría alguien por ahí. Qué tiene de malo eso?