Cada proceso del perfeccionamiento empieza con un diagnóstico real
Dr. Roberto Miranda(Audio: Español)
RESUMEN:
En este discurso, el orador habla sobre los principios de éxito en la vida y cómo convertir los sueños en realidad. Afirma que se requiere más que fe y sentimientos nobles para obtener el éxito, y que la gente exitosa tiene mucha capacidad para ejecutar y convertir en acción sus visiones y proyectos. También señala que la retórica y las declaraciones espirituales no son suficientes para lograr el éxito, y que es necesario examinar la esencia y la sustancia de las enseñanzas. Además, destaca la importancia de la verdad y del autoconocimiento, y menciona el ejemplo de Pedro como el caso clásico del autoengaño acerca de quién es uno verdaderamente. El orador concluye que es necesario iniciar el proceso doloroso y arduo del perfeccionamiento individual para lograr el éxito.
En la vida, a veces tenemos que pasar por procesos de purificación, muerte y confrontación con nosotros mismos para llegar a ser la persona que Dios quiere que seamos. No tengas miedo de reconocer tus debilidades y pedir ayuda para mejorar. El camino al éxito está lleno de fracasos, pero hay que usarlos como aliados y peldaños hacia adelante. Dios trabaja en nuestra vida a través de eventos, inspiraciones, momentos de caída y éxito para formar nuestra personalidad y llevarnos a donde tenemos que ir. Construir sobre principios sólidos bíblicos es la única manera de lograr una victoria legítima y duradera en la vida. No te apresures y busca siempre correr la carrera de la fe de manera legítima. Dios puede tardar en darnos lo que queremos, pero Él está elaborando una lección espiritual que servirá a la humanidad a través de generaciones.
Dios tiene un plan y un tiempo perfecto para nuestras vidas, y debemos aprender a fluir con Su plan en lugar de tratar de adelantarnos a él. Todo en nuestra vida puede ser redimido y usado por Dios para bendición y perfeccionamiento. Debemos discernir entre lo que es del Reino de Dios y lo que es del diablo, y optar siempre por el Reino. También debemos aprender a disfrutar del viaje y de cada experiencia en nuestra vida, celebrando y gozándonos en la gracia de Dios.
En la vida cristiana, es importante disfrutar del viaje hacia la meta. Aprender a gozar de cada experiencia y logro en el camino. Dios es un Dios de procesos y etapas, y Él nos lleva por ellos para prepararnos y bendecirnos. A veces, estos procesos pueden ser dolorosos, pero son necesarios para formar nuestro carácter y llevarnos a la imagen de Cristo. Por lo tanto, es importante no enfocarse solo en la meta, sino enamorarse del proceso. Si permitimos a Dios trabajar en nosotros y nos mantenemos fieles, llegaremos a ser grandes personas en el Reino de Dios.Quiero compartir con ustedes: Principios de éxito en la vida. Ustedes recordarán que estamos hablando de cómo convertir tus sueños, tus visiones en realidad; cómo ir de la visión en tu mente y el deseo de tener éxito, de vivir una vida poderosa, de lograr cosas, lograr tus metas, realizarlas y verlas hechas una realidad en tu vida y qué se requiere para llevar eso a cabo así que de paso simplemente consagramos ahora este momento al Señor: Padre bendícenos y dirígenos en este tiempo que vamos a tener, Padre en el Nombre de Jesús, amén.
Entonces de nuevo: de la visión a la acción cómo convertir nuestros sueños en realidad. Hemos dicho que se requiere más que fe y sentimientos nobles para obtener el éxito no es suficiente simplemente orar y pedirle al Señor y declarar cosas de prosperidad como a veces creemos que es todo lo que necesitamos hacer. Hay una inconsistencia hemos dicho entre los cristianos entre lo que confesamos y lo que vivimos, lo que decimos que somos en Cristo. Decimos por ejemplo: "Todo lo puedo en Cristo que me fortalece" ¿no? y pero entonces en nuestra vida tenemos una cantidad de ataduras y cuando la gente mira nuestros matrimonios hay destrucción, cuando mira nuestras finanzas no estamos a la altura de lo que nosotros aspiramos, cuando miran nuestra vida emocional ven todo tipo de defectos y de ataduras y de cosas que hacen daño alrededor de nosotros.