Ayunar
Dr. Roberto Miranda
(Audio: Español)
RESUMEN: El tema del ayuno y la oración es poco popular en la iglesia, pero es esencial para preparar el camino para el avivamiento que Dios quiere traer a Massachusetts y Nueva Inglaterra. En Joel 1, se habla de una situación negativa en la que la cosecha se ha perdido y el gozo ha desaparecido debido al pecado del pueblo. Dios quiere hacer algo extraordinario en América, pero la iglesia tiene que preparar el camino y proveer las vasijas para que caiga la unción del Señor. Siempre que Dios ha querido derramar su unción sobre una sociedad, el pueblo de Dios ha tenido que prepararse. La iglesia tiene que congregarse y clamar al Señor a través del ayuno y la oración para que baje la visitación del poder de Dios.
El pastor insta a la congregación a participar en un ayuno colectivo de 40 días, aunque no es necesario ayunar durante todo el tiempo. Él cree que el ayuno y la oración son medicinas extremas necesarias para situaciones extremas y necesidades extremas. La iglesia tiene que convocar asamblea, reunir a los ancianos, líderes y a todos los moradores para clamar al Señor y buscar su rostro en ayuno y oración. Dios quiere renovar la iglesia y levantar una nueva generación llena del Espíritu Santo. El pastor también anima a los padres a educar a sus hijos en los secretos espirituales y a formar guerreritos con una espada para que crezcan apasionados por las cosas de Dios. La iglesia debe poner sus prioridades claras y ordenar lo que es importante. La congregación debe sacar tiempo para ayunar y buscar el rostro del Señor para que Dios pueda renovar la iglesia y poner su unción sobre ella.
El autor llama a la iglesia a buscar la unción, la llenura del espíritu santo y el derramamiento de Dios para provocar santo temor entre las naciones. Pide a los creyentes que se comprometan a ayunar y orar para sujeter su carne y apetito por la vida normal y las cosas del mundo, y habitar en la zona del espíritu. El autor también exhorta a orar por la nación y el estado de Massachussets para que Dios derrame avivamiento y renueve a los pastores y las iglesias. El objetivo es preparar el camino para que la gloria de Dios descienda en este tiempo de visitación.
El pastor insta a la congregación a participar en un ayuno colectivo de 40 días, aunque no es necesario ayunar durante todo el tiempo. Él cree que el ayuno y la oración son medicinas extremas necesarias para situaciones extremas y necesidades extremas. La iglesia tiene que convocar asamblea, reunir a los ancianos, líderes y a todos los moradores para clamar al Señor y buscar su rostro en ayuno y oración. Dios quiere renovar la iglesia y levantar una nueva generación llena del Espíritu Santo. El pastor también anima a los padres a educar a sus hijos en los secretos espirituales y a formar guerreritos con una espada para que crezcan apasionados por las cosas de Dios. La iglesia debe poner sus prioridades claras y ordenar lo que es importante. La congregación debe sacar tiempo para ayunar y buscar el rostro del Señor para que Dios pueda renovar la iglesia y poner su unción sobre ella.
El autor llama a la iglesia a buscar la unción, la llenura del espíritu santo y el derramamiento de Dios para provocar santo temor entre las naciones. Pide a los creyentes que se comprometan a ayunar y orar para sujeter su carne y apetito por la vida normal y las cosas del mundo, y habitar en la zona del espíritu. El autor también exhorta a orar por la nación y el estado de Massachussets para que Dios derrame avivamiento y renueve a los pastores y las iglesias. El objetivo es preparar el camino para que la gloria de Dios descienda en este tiempo de visitación.
Quiero poner en ustedes una semilla de inquietud en esta mañana acerca de algo que parecería contradictorio con el espíritu de gozo que acabamos de manifestar ahora mismo. Pero ¿saben qué? esto de lo cual yo les quiero hablar es en realidad lo que hace posible que nosotros podamos fluir en ese gozo y en esa libertad del Señor y que podamos decir con esa fe y esa convicción ‘Se puede’.
Y estoy hablando del ayuno y de la oración. Digan ustedes conmigo, ayuno, otra vez, ayuno. Ese es un tema poco popular para muchos de nosotros, poco popular para las iglesias, pocas veces tomamos tiempo para hablar de este tema tan importante. Pero Dios nos está llamando como iglesia y como ciudad y aún como región en Nueva Inglaterra, a un tiempo de ayuno y de oración sostenido para que pueda bajar la gloria que Dios quiere traer a Massachussets y a Nueva Inglaterra.
Y estoy hablando del ayuno y de la oración. Digan ustedes conmigo, ayuno, otra vez, ayuno. Ese es un tema poco popular para muchos de nosotros, poco popular para las iglesias, pocas veces tomamos tiempo para hablar de este tema tan importante. Pero Dios nos está llamando como iglesia y como ciudad y aún como región en Nueva Inglaterra, a un tiempo de ayuno y de oración sostenido para que pueda bajar la gloria que Dios quiere traer a Massachussets y a Nueva Inglaterra.
