Nueva Biblia Latinoamericana
Cuando los albañiles terminaron de echar los cimientos del templo del SEÑOR, se presentaron los sacerdotes en sus vestiduras, con trompetas, y los Levitas, hijos de Asaf, con címbalos, para alabar al SEÑOR conforme a las instrucciones del rey David de Israel. (Ezra 3:10)
Y cantaban, alabando y dando gracias al SEÑOR: "Porque El es bueno, porque para siempre es Su misericordia sobre Israel." Y todo el pueblo aclamaba a gran voz alabando al SEÑOR porque se habían echado los cimientos de la casa del SEÑOR. (Ezra 3:11)
Pero muchos sacerdotes y Levitas y jefes de casas paternas, que ya eran ancianos y que habían visto el primer templo, cuando se echaban los cimientos de este templo delante de sus ojos, lloraban en alta voz mientras muchos daban gritos de alegría. (Ezra 3:12)
Así que el pueblo no podía distinguir entre el clamor de los gritos de alegría y el clamor del llanto del pueblo, porque el pueblo gritaba en voz alta, y se oía el clamor desde lejos.
Cuando se enteraron los enemigos de Judá y de Benjamín de que el pueblo del destierro estaba edificando un templo al SEÑOR, Dios de Israel, (Ezra 4:1)
se presentaron ante Zorobabel y ante los jefes de casas paternas, y les dijeron: "Vamos a edificar con ustedes, porque, como ustedes, buscamos a su Dios, y le hemos estado ofreciendo sacrificios desde los días de Esar Hadón, rey de Asiria, que nos trajo aquí." (Ezra 4:2)
Pero Zorobabel y Jesúa y los demás jefes de casas paternas de Israel les dijeron: "No tienen nada en común con nosotros para que juntos edifiquemos una casa a nuestro Dios, sino que nosotros unidos la edificaremos al SEÑOR, Dios de Israel, como nos ordenó el rey Ciro, rey de Persia." (Ezra 4:3)

Other publications related to "Ezra 3:13":

Dr. Roberto Miranda
Experience victory in war
A sermon on the importance of not waiting for the right time to do Gods work, using the example of the Hebrew people rebuilding the temple in Jerusalem and the opposition they faced. Encourages spiritual warfare and the use of Gods word as weapons against the devils attacks.


Dr. Roberto Miranda
Take heart people all of the earth - And work
In this article, Dr. Roberto Miranda encourages sacrificial giving and hard work to build the Kingdom of God, and emphasizes the importance of focusing on Gods glory.


Ezra 3:13 - Cross Reference

Cuando ya se acercaba, junto a la bajada del Monte de los Olivos, toda la multitud de los discípulos, regocijándose, comenzó a alabar a Dios a gran voz por todas las maravillas que habían visto, (Luke 19:37)
Al oír Josué el ruido del pueblo que gritaba, dijo a Moisés: "Hay gritos de guerra en el campamento." (Exodus 32:17)
Salmo de acción de gracias. Aclamen con júbilo al SEÑOR, toda la tierra. (Psalm 100:1)
Y llamaron a aquel lugar Boquim (Llorones). Y allí ofrecieron sacrificio al SEÑOR. (Judges 2:5)
Aquel día ofrecieron gran cantidad de sacrificios y se regocijaron porque Dios les había dado mucha alegría, también las mujeres y los niños se regocijaron. El regocijo de Jerusalén se oía desde lejos. (Nehemiah 12:43)
voz de gozo y voz de alegría, la voz del novio y la voz de la novia, la voz de los que dicen: "Den gracias al SEÑOR de los ejércitos, Porque el SEÑOR es bueno, Porque para siempre es Su misericordia"; y de los que traen ofrenda de acción de gracias a la casa del SEÑOR. Porque restauraré el bienestar de esta tierra como fueron al principio,' dice el SEÑOR. (Jeremiah 33:11)
Luego todo el pueblo subió tras él. El pueblo tocaba flautas y se regocijaba con gran alegría, de modo que la tierra se estremecía con su sonido. (1 Kings 1:40)
¿Quién eres tú, oh gran monte? Ante Zorobabel, te convertirás en llanura; y él sacará la piedra clave entre aclamaciones de "¡Gracia, gracia a ella!"'" (Zechariah 4:7)
Y aconteció que cuando el arca del pacto del SEÑOR entró al campamento, todo Israel gritó con voz tan fuerte que la tierra tembló. (1 Samuel 4:5)
Y el sacerdote Sadoc y el profeta Natán lo han ungido rey en Gihón, y de allí han subido gozosos y se ha alborotado la ciudad. Este es el ruido que han oído. (1 Kings 1:45)
Pero alégrense todos los que en Ti se refugian; Para siempre canten con júbilo, Porque Tú los proteges; Regocíjense en Ti los que aman Tu nombre. (Psalm 5:11)