Entonces Jesúa, con sus hijos y sus hermanos, Cadmiel con sus hijos, los hijos de Judá y los hijos de Henadad con sus hijos y sus hermanos los Levitas, se presentaron todos a una para dirigir a los obreros en la casa de Dios.
(Ezra 3:9)
Cuando los albañiles terminaron de echar los cimientos del templo del SEÑOR, se presentaron los sacerdotes en sus vestiduras, con trompetas, y los Levitas, hijos de Asaf, con címbalos, para alabar al SEÑOR conforme a las instrucciones del rey David de Israel.
(Ezra 3:10)
Y cantaban, alabando y dando gracias al SEÑOR: "Porque El es bueno, porque para siempre es Su misericordia sobre Israel." Y todo el pueblo aclamaba a gran voz alabando al SEÑOR porque se habían echado los cimientos de la casa del SEÑOR.
(Ezra 3:11)
Pero muchos sacerdotes y Levitas y jefes de casas paternas, que ya eran ancianos y que habían visto el primer templo, cuando se echaban los cimientos de este templo delante de sus ojos, lloraban en alta voz mientras muchos daban gritos de alegría.
Así que el pueblo no podía distinguir entre el clamor de los gritos de alegría y el clamor del llanto del pueblo, porque el pueblo gritaba en voz alta, y se oía el clamor desde lejos.
(Ezra 3:13)
Cuando se enteraron los enemigos de Judá y de Benjamín de que el pueblo del destierro estaba edificando un templo al SEÑOR, Dios de Israel,
(Ezra 4:1)
se presentaron ante Zorobabel y ante los jefes de casas paternas, y les dijeron: "Vamos a edificar con ustedes, porque, como ustedes, buscamos a su Dios, y le hemos estado ofreciendo sacrificios desde los días de Esar Hadón, rey de Asiria, que nos trajo aquí."
(Ezra 4:2)
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Ezra 3:12 - Cross Reference
Aunque tu principio haya sido insignificante, Con todo, tu final aumentará sobremanera.
(Job 8:7)
Yo los traigo del país del norte, Y los reuniré de los confines de la tierra, Entre ellos los ciegos y los cojos, La mujer encinta y también la que está dando a luz. Una gran compañía volverá acá.
(Jeremiah 31:8)
El más pequeño llegará a ser un millar (una tribu), Y el más insignificante una nación poderosa. Yo, el SEÑOR, a su tiempo lo apresuraré.
(Isaiah 60:22)
No temas, gusano de Jacob, ustedes hombres de Israel. Yo te ayudaré," declara el SEÑOR, "tu Redentor es el Santo de Israel.
(Isaiah 41:14)
El que con lágrimas anda, llevando la semilla de la siembra, En verdad volverá con gritos de alegría, trayendo sus gavillas.
(Psalm 126:6)
¿Pues quién ha despreciado el día de las pequeñeces? Estos siete se alegrarán cuando vean la plomada en la mano de Zorobabel; estos son los ojos del SEÑOR que recorren toda la tierra."
(Zechariah 4:10)
Otra parábola les contó Jesús: "El reino de los cielos es semejante a un grano de mostaza, que un hombre tomó y sembró en su campo,
(Matthew 13:31)
¿Quién ha quedado entre ustedes que haya visto este templo en su gloria primera? ¿Y cómo lo ven ahora? Tal como está, ¿no es como nada ante sus ojos?
(Haggai 2:3)
La estuvo mirando hasta que una piedra fue cortada sin ayuda de manos, y golpeó la estatua en sus pies de hierro y de barro, y los desmenuzó.
(Daniel 2:34)