Nueva Biblia Latinoamericana
Que el SEÑOR perdone a su siervo en esto: Cuando mi señor entre en el templo de Rimón para adorar allí y se apoye en mi mano, y yo me incline en el templo de Rimón cuando tenga que adorar allí, que el SEÑOR perdone a su siervo por esto." (2 Reyes 5:18)
Y él le dijo: "Vete en paz." Y se alejó de él a cierta distancia. (2 Reyes 5:19)
Pero Giezi, criado de Eliseo, el hombre de Dios, dijo para sí: "Puesto que mi señor ha dispensado a este Naamán Arameo al no recibir de sus manos lo que él trajo, vive el SEÑOR que correré tras él y tomaré algo de él." (2 Reyes 5:20)
Y Giezi siguió a Naamán. Cuando Naamán vio a uno corriendo tras él, bajó de su carro a encontrarlo, y dijo: "¿Está todo bien?"
Y él dijo: "Todo está bien. Mi señor me ha enviado, diciendo: 'En este mismo momento dos jóvenes de los hijos de los profetas han venido a mí de la región montañosa de Efraín. Te ruego que les des 34 kilos de plata y dos mudas de ropa.'" (2 Reyes 5:22)
Y Naamán dijo: "Dígnate aceptar 64 kilos." Y le insistió y ató 64 kilos de plata en dos bolsas con dos mudas de ropa, y los entregó a dos de sus criados; y éstos los llevaron delante de Giezi. (2 Reyes 5:23)
Cuando llegó al monte, los tomó de sus manos y los guardó en la casa, luego despidió a los hombres y ellos se fueron. (2 Reyes 5:24)

Otras publicaciones relacionadas con "2 Reyes 5:21":

Dr. Roberto Miranda
Una gran nube de testigos nos están viendo
En este artículo, el Dr. Roberto Miranda habla sobre la importancia de la integridad moral y financiera en el Reino de Dios y cómo debemos ser siervos completamente consagrados a Dios para no manchar el testimonio de Cristo en nuestras vidas.


Dr. Roberto Miranda
La actitud agradecida de Naamán
En esta meditación se analiza la actitud agradecida de Naamán después de ser sanado por Dios y cómo se destaca la importancia de la humildad, sujeción, autoridad, integridad y ser una influencia de armonía y bendición en la Iglesia.


Dr. Roberto Miranda
Un tratamiento para el orgullo
En este artículo, el Dr. Roberto Miranda habla sobre la importancia de la experiencia sobrenatural en la Iglesia de Jesucristo para poder ofrecer soluciones sobrenaturales a los retos de la vida moderna y ejercer una autoridad poderosa en el mundo. También destaca cómo Dios quiere tratar con nuestra personalidad además de nuestras necesidades.


Dr. Roberto Miranda
La recompensa de Eliseo
En esta meditación se analiza la postura de Eliseo de rechazar la recompensa financiera ofrecida por Naamán después de recibir su milagro, destacando la importancia de mantener la integridad y separación como siervos de Dios y de manejar el dinero del pueblo de Dios con cuidado para evitar cualquier apariencia de corrupción. También enfatiza la importancia de mantener la integridad moral y espiritual para ser un testimonio efectivo ante el mundo.


Dr. Roberto Miranda
La metodología del reino
En este sermón, el pastor habla sobre la historia de Naamán en Segundo de Reyes y cómo se relaciona con temas como la sanidad y el llamado de Dios a la Iglesia a ser evangelística.


Dr. Roberto Miranda
Un Dios soberano que tiene propósitos misteriosos
En este artículo, el Dr. Roberto Miranda reflexiona sobre la soberanía de Dios y sus propósitos misteriosos a través del pasaje de Naamán y Eliseo.


2 Reyes 5:21 - Referencia Cruzada

Jesús iba con ellos, pero cuando ya no estaba lejos de la casa, el centurión envió a unos amigos, diciendo: "Señor, no te molestes más, porque no soy digno de que Tú entres bajo mi techo; (Lucas 7:6)
El eunuco le respondió: "¿Cómo podré, a menos que alguien me guíe?" E invitó a Felipe a que subiera y se sentara con él. (Hechos 8:31)
Cuando Pedro iba a entrar, Cornelio salió a recibirlo, y postrándose a sus pies, lo adoró. (Hechos 10:25)
Y el centinela que estaba en la torre de Jezreel vio la comitiva de Jehú que venía, y dijo: "Veo una comitiva." Y Joram dijo: "Toma un jinete y envíalo a su encuentro, y que diga: '¿Hay paz?'" (2 Reyes 9:17)
Te ruego que corras ahora a su encuentro y le digas: '¿Te va bien a ti? ¿Le va bien a tu marido? ¿Le va bien al niño?'" Y ella respondió: "Estamos bien." (2 Reyes 4:26)