Nueva Biblia Latinoamericana
Hubo guerra entre Asa y Baasa, rey de Israel, todos los días que vivieron. (1 Reyes 15:32)
En el tercer año de Asa, rey de Judá, Baasa, hijo de Ahías, comenzó a reinar sobre todo Israel en Tirsa, y reinó veinticuatro años. (1 Reyes 15:33)
Hizo lo malo ante los ojos del SEÑOR, y anduvo en el camino de Jeroboam y en el pecado con que hizo pecar a Israel. (1 Reyes 15:34)
Y la palabra del SEÑOR vino a Jehú, hijo de Hananí, contra Baasa:
Yo te levanté del polvo y te hice príncipe sobre Mi pueblo Israel, y has andado en el camino de Jeroboam, y has hecho pecar a Mi pueblo Israel provocándome a ira con sus pecados. (1 Reyes 16:2)
Por tanto, consumiré a Baasa y a su casa, y haré su casa como la casa de Jeroboam, hijo de Nabat. (1 Reyes 16:3)
El que de Baasa muera en la ciudad, se lo comerán los perros, y el que de él muera en el campo, se lo comerán las aves del cielo." (1 Reyes 16:4)

Otras publicaciones relacionadas con "1 Reyes 16:1":

Dr. Roberto Miranda
De la crisis a la bendición
El autor, Dr. Roberto Miranda, habla sobre cómo el capítulo 20 de Segundo de Crónicas de la Biblia puede ser un modelo para la vida cristiana en tiempos de crisis. Josafat y el pueblo de Judá buscaron a Dios a través de la oración y el ayuno en medio de una crisis nacional y fueron bendecidos con la victoria a través de la fe y la adoración. El artículo también menciona cómo la palabra Beraca se utiliza para describir un negocio cristiano en México y cómo la misma trayectoria de la crisis a la bendición puede ser nuestra si confiamos en Dios.


Dr. Roberto Miranda
Nuestra fe debe afectar todos los aspectos de nuestra vida
Consejos sobre cómo la fe debe afectar todos los aspectos de nuestra vida, desde nuestras creencias hasta nuestras decisiones públicas y políticas. Al renunciar al pecado y vivir según los principios espirituales, podemos recibir la bendición de Dios.


1 Reyes 16:1 - Referencia Cruzada

También, la palabra del SEÑOR vino por medio del profeta Jehú, hijo de Hananí, contra Baasa y su casa, no sólo por todo el mal que hizo ante los ojos del SEÑOR, provocándolo a ira con la obra de sus manos, siendo semejante a la casa de Jeroboam, sino también por haber destruido a ésta. (1 Reyes 16:7)
En ese tiempo el vidente Hananí vino a Asa, rey de Judá, y le dijo: "Por cuanto te has apoyado en el rey de Aram y no te has apoyado en el SEÑOR tu Dios, por eso el ejército del rey de Aram ha escapado de tu mano. (2 Crónicas 16:7)
Pero el vidente Jehú, hijo de Hananí, salió a encontrarlo y dijo al rey Josafat: "¿Vas a ayudar al impío y amar a los que odian al SEÑOR, y con esto traer sobre ti la ira del SEÑOR? (2 Crónicas 19:2)
En el tercer año de Asa, rey de Judá, Baasa, hijo de Ahías, comenzó a reinar sobre todo Israel en Tirsa, y reinó veinticuatro años. (1 Reyes 15:33)
Los demás hechos de Josafat, los primeros y los postreros, están escritos en las crónicas de Jehú, hijo de Hananí, que están mencionados en el Libro de los Reyes de Israel. (2 Crónicas 20:34)