Nueva Biblia Latinoamericana
Josafat reinó sobre Judá. Tenía treinta y cinco años cuando comenzó a reinar, y reinó veinticinco años en Jerusalén. El nombre de su madre era Azuba, hija de Silhi. (2 Crónicas 20:31)
Anduvo en el camino de su padre Asa, y no se apartó de él, haciendo lo recto ante los ojos del SEÑOR. (2 Crónicas 20:32)
Sin embargo, los lugares altos no fueron quitados, pues el pueblo no había vuelto aún su corazón al Dios de sus padres. (2 Crónicas 20:33)
Los demás hechos de Josafat, los primeros y los postreros, están escritos en las crónicas de Jehú, hijo de Hananí, que están mencionados en el Libro de los Reyes de Israel.
Después de esto Josafat, rey de Judá, se alió con Ocozías, rey de Israel. Al hacer esto obró impíamente. (2 Crónicas 20:35)
Y se alió con él para hacer naves que fueran a Tarsis, y construyeron las naves en Ezión Geber. (2 Crónicas 20:36)
Entonces Eliezer, hijo de Dodava de Maresa, profetizó contra Josafat: "Por cuanto te has aliado con Ocozías, el SEÑOR ha destruido tus obras." Así que las naves fueron destruidas y no pudieron ir a Tarsis. (2 Crónicas 20:37)

Otras publicaciones relacionadas con "2 Crónicas 20:34":

Dr. Roberto Miranda
De la crisis a la bendición
El autor, Dr. Roberto Miranda, habla sobre cómo el capítulo 20 de Segundo de Crónicas de la Biblia puede ser un modelo para la vida cristiana en tiempos de crisis. Josafat y el pueblo de Judá buscaron a Dios a través de la oración y el ayuno en medio de una crisis nacional y fueron bendecidos con la victoria a través de la fe y la adoración. El artículo también menciona cómo la palabra Beraca se utiliza para describir un negocio cristiano en México y cómo la misma trayectoria de la crisis a la bendición puede ser nuestra si confiamos en Dios.


Dr. Roberto Miranda
Nuestra fe debe afectar todos los aspectos de nuestra vida
Consejos sobre cómo la fe debe afectar todos los aspectos de nuestra vida, desde nuestras creencias hasta nuestras decisiones públicas y políticas. Al renunciar al pecado y vivir según los principios espirituales, podemos recibir la bendición de Dios.


2 Crónicas 20:34 - Referencia Cruzada

También, la palabra del SEÑOR vino por medio del profeta Jehú, hijo de Hananí, contra Baasa y su casa, no sólo por todo el mal que hizo ante los ojos del SEÑOR, provocándolo a ira con la obra de sus manos, siendo semejante a la casa de Jeroboam, sino también por haber destruido a ésta. (1 Reyes 16:7)
Los demás hechos de Abías, y sus caminos y sus palabras están escritos en la historia del profeta Iddo. (2 Crónicas 13:22)
Pero el vidente Jehú, hijo de Hananí, salió a encontrarlo y dijo al rey Josafat: "¿Vas a ayudar al impío y amar a los que odian al SEÑOR, y con esto traer sobre ti la ira del SEÑOR? (2 Crónicas 19:2)
Y la palabra del SEÑOR vino a Jehú, hijo de Hananí, contra Baasa: (1 Reyes 16:1)
Los hechos de Roboam, los primeros y los postreros, ¿no están escritos en los libros del profeta Semaías y del vidente Iddo, conforme al registro genealógico? Hubo guerras continuamente entre Roboam y Jeroboam. (2 Crónicas 12:15)
Los hechos de Asa, los primeros y los postreros, están escritos en el Libro de los Reyes de Judá y de Israel. (2 Crónicas 16:11)