Pero el hombre de Dios dijo al rey: "Aunque usted me diera la mitad de su casa no iría con usted, tampoco comería pan ni bebería agua en este lugar.
(1 Reyes 13:8)Porque así se me ordenó por palabra del SEÑOR, que me dijo: 'No comerás pan, ni beberás agua, ni volverás por el camino que fuiste.'"
(1 Reyes 13:9)Y se fue por otro camino, no regresó por el camino por donde había ido a Betel.
(1 Reyes 13:10)Moraba entonces en Betel un anciano profeta; y sus hijos fueron y le contaron todo lo que el hombre de Dios había hecho aquel día en Betel. Las palabras que él había hablado al rey, también las contaron a su padre.
Y su padre les dijo: "¿Por dónde se fue?" Y sus hijos le mostraron el camino por donde se había ido el hombre de Dios que había venido de Judá.
(1 Reyes 13:12)Entonces dijo a sus hijos: "Aparéjenme el asno." Le aparejaron el asno, se montó sobre él,
(1 Reyes 13:13)y fue tras el hombre de Dios; lo halló sentado debajo de una encina, y le dijo: "¿Eres tú el hombre de Dios que vino de Judá?" Y él respondió: "Yo soy."
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1 Reyes 13:11 - Referencia Cruzada
Y levantó Balaam sus ojos y vio a Israel acampado por tribus; y vino sobre él el Espíritu de Dios.
(Números 24:2)Entonces pasaron unos hombres y vieron el cadáver tirado en el camino y el león que estaba junto al cadáver; y fueron y lo dijeron en la ciudad donde vivía el anciano profeta.
(1 Reyes 13:25)Cuando todos los que lo conocían de antes vieron que ahora profetizaba con los profetas, los del pueblo se decían unos a otros: "¿Qué le ha sucedido al hijo de Cis? ¿Está Saúl también entre los profetas?"
(1 Samuel 10:11)pero fue reprendido por su transgresión, pues una muda bestia de carga, hablando con voz humana, reprimió la locura del profeta.
(2 Pedro 2:16)Dios salió al encuentro de Balaam, y éste le dijo: "He preparado los siete altares y he ofrecido un novillo y un carnero sobre cada altar."
(Números 23:4)Hijo de hombre, profetiza contra los profetas de Israel que profetizan, y dile a los que profetizan por su propia inspiración: 'Escuchen la palabra del SEÑOR.
(Ezequiel 13:2)(pues si un hombre no sabe cómo gobernar su propia casa, ¿cómo podrá cuidar de la iglesia de Dios?)
(1 Timoteo 3:5)Y él dijo: "Déjenlo en paz; que nadie moleste sus huesos." Así dejaron sus huesos intactos con los huesos del profeta que vino de Samaria.
(2 Reyes 23:18)Y cuando ellos estaban a la mesa, la palabra del SEÑOR vino al profeta que le había hecho volver;
(1 Reyes 13:20)ni los profetas de Israel que profetizaban acerca de Jerusalén y que veían para ella visiones de paz cuando no había paz,' declara el Señor DIOS.
(Ezequiel 13:16)Muchos Me dirán en aquel día: 'Señor, Señor, ¿no profetizamos en Tu nombre, y en Tu nombre echamos fuera demonios, y en Tu nombre hicimos muchos milagros?'
(Mateo 7:22)