El ha sacrificado bueyes, animales cebados y ovejas en abundancia, y ha invitado a todos los hijos del rey, al sacerdote Abiatar y a Joab, jefe del ejército, pero no ha invitado a Salomón su siervo.
(1 Reyes 1:19)En cuanto a usted, mi señor el rey, los ojos de todo Israel están sobre usted, para que les haga saber quién ha de sentarse en el trono de mi señor el rey después de él.
(1 Reyes 1:20)Pues sucederá que en cuanto mi señor el rey duerma con sus padres, yo y mi hijo Salomón seremos tenidos por culpables."
(1 Reyes 1:21)Sucedió que mientras ella estaba aún hablando con el rey, entró el profeta Natán.
Y le informaron al rey: "Aquí está el profeta Natán." Cuando éste entró a la presencia del rey, se postró ante el rey rostro en tierra.
(1 Reyes 1:23)Entonces Natán dijo: "Mi señor el rey, ¿acaso ha dicho usted: 'Adonías será rey después de mí y se sentará en mi trono'?
(1 Reyes 1:24)Porque él ha descendido hoy y ha sacrificado bueyes, animales cebados y ovejas en abundancia, ha invitado a todos los hijos del rey, a los jefes del ejército y al sacerdote Abiatar, y allí están comiendo y bebiendo en su presencia, y gritando: '¡Viva el rey Adonías!'
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1 Reyes 1:22 - Referencia Cruzada
Aún estaba yo hablando, orando y confesando mi pecado y el pecado de mi pueblo Israel, y presentando mi súplica delante del Señor mi Dios por el santo monte de mi Dios,
(Daniel 9:20)Y sucedió que antes de haber terminado de hablar, Rebeca, hija de Betuel, hijo de Milca, mujer de Nacor, hermano de Abraham, salió con el cántaro sobre su hombro.
(Génesis 24:15)Mientras estaba éste hablando, vino otro y dijo: "Fuego de Dios cayó del cielo y quemó las ovejas y a los criados y los consumió; sólo yo escapé para contárselo a usted."
(Job 1:16)