Entonces Abigail regresó a Nabal, y éste tenía un banquete en su casa, como el banquete de un rey. Y el corazón de Nabal estaba alegre, pues estaba muy ebrio, por lo cual ella no le comunicó nada hasta el amanecer.
(1 Samuel 25:36)
Pero sucedió que por la mañana, cuando se le pasó el vino a Nabal, su mujer le contó estas cosas, y su corazón se quedó como muerto dentro de él, y se puso como una piedra.
(1 Samuel 25:37)
Y unos diez días después, sucedió que el SEÑOR hirió a Nabal, y murió.
(1 Samuel 25:38)
Cuando David supo que Nabal había muerto, dijo: "Bendito sea el SEÑOR, que ha defendido la causa de mi afrenta de manos de Nabal, y ha preservado a Su siervo del mal. El SEÑOR también ha devuelto la maldad de Nabal sobre su propia cabeza." Entonces David envió un mensaje a Abigail, para tomarla para sí por mujer.
Y los siervos de David fueron a casa de Abigail en Carmel, y le hablaron diciendo: "David nos ha enviado a usted, para tomarla para sí por mujer."
(1 Samuel 25:40)
Ella se levantó y postrándose rostro en tierra, dijo: "Miren, su sierva es una criada para lavar los pies de los siervos de mi señor."
(1 Samuel 25:41)
Abigail se levantó apresuradamente, montó en un asno, y con sus cinco doncellas que la atendían siguió a los mensajeros de David, y fue su mujer.
(1 Samuel 25:42)
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1 Samuel 25:39 - Referencia Cruzada
Tú has defendido, oh Señor, la causa de mi alma, Tú has redimido mi vida.
(Lamentaciones 3:58)
El que halla esposa halla algo bueno Y alcanza el favor del SEÑOR.
(Proverbios 18:22)
Su iniquidad volverá sobre su cabeza, Y su violencia descenderá sobre su coronilla.
(Salmos 7:16)
Y que el mismo Dios de paz los santifique por completo; y que todo su ser, espíritu, alma y cuerpo, sea preservado irreprensible para la venida de nuestro Señor Jesucristo.
(1 Tesalonicenses 5:23)
Cuando David lo supo después, dijo: "Yo y mi reino somos inocentes para siempre delante del SEÑOR de la sangre de Abner, hijo de Ner.
(2 Samuel 3:28)
Casa y riqueza son herencia de los padres, Pero la mujer prudente viene del SEÑOR.
(Proverbios 19:14)
Engañosa es la gracia y vana la belleza, Pero la mujer que teme al SEÑOR, ésa será alabada.
(Proverbios 31:30)
Sin embargo, vive el SEÑOR, Dios de Israel, que me ha impedido hacerte mal, que si tú no hubieras venido pronto a encontrarme, ciertamente, para la luz del alba, no le hubiera quedado a Nabal ni un varón."
(1 Samuel 25:34)
¡Por haberse puesto al frente los jefes en Israel, Por haberse ofrecido el pueblo voluntariamente, Bendigan al SEÑOR!
(Jueces 5:2)
Porque el SEÑOR defenderá su causa Y quitará la vida de los que los despojan.
(Proverbios 22:23)
El Señor me librará de toda obra mala y me traerá a salvo a Su reino celestial. A El sea la gloria por los siglos de los siglos. Amén.
(2 Timoteo 4:18)
Y rogamos a Dios que no hagan nada malo. No para que nosotros aparezcamos aprobados, sino para que ustedes hagan lo bueno, aunque nosotros aparezcamos reprobados.
(2 Corintios 13:7)
Después de esto oí como una gran voz de una gran multitud en el cielo, que decía: "¡Aleluya! La salvación y la gloria y el poder pertenecen a nuestro Dios,
(Apocalipsis 19:1)
Entonces David dijo a Abigail: "Bendito sea el SEÑOR, Dios de Israel, que te envió hoy a encontrarme,
(1 Samuel 25:32)
Mujer hacendosa, ¿quién la hallará? Su valor supera en mucho al de las joyas.
(Proverbios 31:10)
La indignación del SEÑOR soportaré, Porque he pecado contra El, Hasta que defienda mi causa y establezca mi derecho. El me sacará a la luz, Y yo veré Su justicia.
(Miqueas 7:9)
Sea el SEÑOR juez y decida entre usted y yo; que El vea y defienda mi causa y me libre de su mano."
(1 Samuel 24:15)
Dijo además el rey a Simei: "Tú sabes todo el mal que hiciste a mi padre David, que tú reconoces en tu corazón; el SEÑOR, pues, hará recaer tu mal sobre tu propia cabeza.
(1 Reyes 2:44)
Ahora pues, señor mío, vive el SEÑOR y vive su alma. Puesto que el SEÑOR le ha impedido derramar sangre y vengarse por su propia mano, sean pues como Nabal sus enemigos y los que buscan el mal contra mi señor.
(1 Samuel 25:26)
Tenemos una hermana pequeña, Y todavía no tiene pechos; ¿Qué haremos por nuestra hermana El día en que sea pedida?
(Cantares 8:8)
El justo se alegrará cuando vea la venganza, Se lavará los pies en la sangre de los impíos;
(Salmos 58:10)
Colgaron, pues, a Amán en la horca que había preparado para Mardoqueo, y se aplacó el furor del rey.
(Ester 7:10)
El SEÑOR vive, bendita sea mi roca, Y ensalzado sea Dios, roca de mi salvación,
(2 Samuel 22:47)
Por tanto, voy a cercar su camino con espinos, Y levantaré un muro contra ella para que no encuentre sus senderos.
(Oseas 2:6)