Pero levantaré para Mí un sacerdote fiel que hará conforme a los deseos de Mi corazón y de Mi alma; y le edificaré una casa duradera, y él andará siempre delante de Mi ungido.
(1 Samuel 2:35)Y todo aquél que haya quedado de tu casa vendrá y se postrará ante él por una moneda de plata o una torta de pan, y le dirá: "Asígname a uno de los oficios sacerdotales para que pueda comer un bocado de pan."'"
(1 Samuel 2:36)El joven Samuel servía (ministraba) al SEÑOR en presencia de Elí. La palabra del SEÑOR escaseaba en aquellos días, y las visiones no eran frecuentes.
(1 Samuel 3:1)Y aconteció un día, estando Elí acostado en su aposento (sus ojos habían comenzado a oscurecerse y no podía ver bien ),
cuando la lámpara de Dios aún no se había apagado y Samuel estaba acostado en el templo del SEÑOR donde estaba el arca de Dios,
(1 Samuel 3:3)que el SEÑOR llamó a Samuel, y él respondió: "Aquí estoy."
(1 Samuel 3:4)Entonces corrió a Elí y le dijo: "Aquí estoy, pues me llamaste." Pero Elí le respondió: "Yo no he llamado, vuelve a acostarte." Y él fue y se acostó.
(1 Samuel 3:5)Otras publicaciones relacionadas con "1 Samuel 3:2":
1 Samuel 3:2 - Referencia Cruzada
Los días de nuestra vida llegan a setenta años; Y en caso de mayor vigor, a ochenta años. Con todo, su orgullo es sólo trabajo y pesar, Porque pronto pasa, y volamos.
(Salmos 90:10)Elí tenía noventa y ocho años, sus ojos se habían cegado y no podía ver.
(1 Samuel 4:15)Pero su padre rehusó y dijo: "Lo sé, hijo mío, lo sé. El también llegará a ser un pueblo, y él también será grande. Sin embargo, su hermano menor será más grande que él, y su descendencia llegará a ser multitud de naciones."
(Génesis 48:19)Los ojos de Israel estaban tan débiles por la vejez que no podía ver. Entonces José se los acercó, y él los besó y los abrazó.
(Génesis 48:10)Y aconteció que siendo ya viejo Isaac, y sus ojos demasiado débiles para ver, llamó a Esaú, su hijo mayor, y le dijo: "Hijo mío." "Aquí estoy," le respondió Esaú.
(Génesis 27:1)Elí era ya muy anciano; y oyó todo lo que sus hijos estaban haciendo a todo Israel, y cómo se acostaban con las mujeres que servían a la entrada de la tienda de reunión,
(1 Samuel 2:22)El día cuando tiemblen los guardas de la casa Y los fuertes se encorven, Las que muelen estén ociosas porque son pocas, Y se nublen los que miran por las ventanas.
(Eclesiastés 12:3)