Nueva Biblia Latinoamericana
Y Manoa dijo a su mujer: "Ciertamente moriremos, porque hemos visto a Dios." (Jueces 13:22)
Pero su mujer le contestó: "Si el SEÑOR hubiera deseado matarnos, no habría aceptado el holocausto ni la ofrenda de cereal de nuestras manos; tampoco nos habría mostrado todas estas cosas, ni nos habría permitido ahora oír cosas como éstas." (Jueces 13:23)
Y la mujer dio a luz un hijo y le puso por nombre Sansón. El niño creció y el SEÑOR lo bendijo. (Jueces 13:24)
Y el Espíritu del SEÑOR comenzó a manifestarse en él en Majané Dan (el campamento de Dan), entre Zora y Estaol.
Sansón descendió a Timnat y vio allí a una mujer de las hijas de los Filisteos. (Jueces 14:1)
Cuando regresó, se lo contó a su padre y a su madre: "Vi en Timnat a una mujer de las hijas de los Filisteos. Ahora pues, tómenmela por mujer." (Jueces 14:2)
Le respondieron su padre y su madre: "¿No hay mujer entre las hijas de tus parientes o entre todo nuestro pueblo, para que vayas a tomar mujer de los Filisteos incircuncisos?" Pero Sansón dijo a su padre: "Tómala para mí, porque ella me agrada." (Jueces 14:3)

Otras publicaciones relacionadas con "Jueces 13:25":

Dr. Roberto Miranda
Vivir en tiempos de normalidad
En este sermón, el pastor habla sobre la historia de la Sunamita y la importancia de buscar a Dios con pasión y persistencia, así como de bendecir y apoyar a la iglesia. También se centra en el liderazgo espiritual de los hombres y la generosidad en la iglesia, y destaca la bendición que viene al preferir a Dios sobre todas las cosas.


Dr. Roberto Miranda
Sansón - la importancia de no desperdiciar el llamado ni el don de Dios
En esta meditación, el pastor habla sobre la importancia de apreciar y valorar el llamado y la unción que Dios ha puesto en nuestras vidas, y de cuidar y proteger nuestro don y llamado para evitar que el enemigo nos ataque por nuestro lado débil. Se enfoca en la historia de Sansón y advierte sobre el peligro y el precio de la unción divina, y anima a la congregación a consagrarse a Dios y buscar su gloria y unción.


Jueces 13:25 - Referencia Cruzada

Y vino sobre él el Espíritu del SEÑOR, y juzgó a Israel. Cuando salió a la guerra, el SEÑOR entregó en su mano a Cusán Risataim, rey de Mesopotamia, y su poder prevaleció sobre Cusán Risataim. (Jueces 3:10)
Entonces de la familia de los Danitas, de Zora y de Estaol, salieron 600 hombres con armas de guerra. (Jueces 18:11)
En las tierras bajas: Estaol, Zora, Asena, (Josué 15:33)
Y el Espíritu del SEÑOR vino sobre Gedeón, y éste tocó la trompeta y los de Abiezer se juntaron para seguirlo. (Jueces 6:34)
El Espíritu de Dios vino con poder sobre Saúl al escuchar estas palabras, y Saúl se enojó grandemente. (1 Samuel 11:6)
Porque Aquél a quien Dios ha enviado habla las palabras de Dios, pues El da el Espíritu sin medida. (Juan 3:34)
Entonces Jesús fue llevado por el Espíritu (Santo) al desierto para ser tentado (puesto a prueba) por el diablo. (Mateo 4:1)
El Espíritu del SEÑOR vino sobre Jefté. Entonces Jefté pasó por Galaad y Manasés. Luego pasó por Mizpa de Galaad, y de Mizpa de Galaad fue adonde estaban los Amonitas. (Jueces 11:29)