Nueva Biblia Latinoamericana
El ángel del SEÑOR no se volvió a aparecer a Manoa ni a su mujer. Entonces Manoa supo que era el ángel del SEÑOR. (Jueces 13:21)
Y Manoa dijo a su mujer: "Ciertamente moriremos, porque hemos visto a Dios." (Jueces 13:22)
Pero su mujer le contestó: "Si el SEÑOR hubiera deseado matarnos, no habría aceptado el holocausto ni la ofrenda de cereal de nuestras manos; tampoco nos habría mostrado todas estas cosas, ni nos habría permitido ahora oír cosas como éstas." (Jueces 13:23)
Y la mujer dio a luz un hijo y le puso por nombre Sansón. El niño creció y el SEÑOR lo bendijo.
Y el Espíritu del SEÑOR comenzó a manifestarse en él en Majané Dan (el campamento de Dan), entre Zora y Estaol. (Jueces 13:25)
Sansón descendió a Timnat y vio allí a una mujer de las hijas de los Filisteos. (Jueces 14:1)
Cuando regresó, se lo contó a su padre y a su madre: "Vi en Timnat a una mujer de las hijas de los Filisteos. Ahora pues, tómenmela por mujer." (Jueces 14:2)

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Jueces 13:24 - Referencia Cruzada

Y Jesús crecía en sabiduría, en estatura (edad) y en gracia para con Dios y los hombres. (Lucas 2:52)
Y el niño crecía y se fortalecía en espíritu; y vivió en lugares desiertos hasta el día en que apareció en público a Israel. (Lucas 1:80)
¿Y qué más diré? Pues el tiempo me faltaría para contar de Gedeón, Barac, Sansón, Jefté, David, Samuel y los profetas; (Hebreos 11:32)
Samuel creció, y el SEÑOR estaba con él. No dejó sin cumplimiento ninguna de sus palabras. (1 Samuel 3:19)