Nueva Biblia Latinoamericana
Hoy llegué a la fuente, y dije: 'Oh SEÑOR, Dios de mi señor Abraham, si ahora quieres, Tú puedes dar éxito a mi viaje en el cual ando. (Génesis 24:42)
Yo estoy parado aquí junto a la fuente de agua. Que la doncella que salga a sacar agua, y a quien yo diga: "Le ruego que me dé a beber un poco de agua de su cántaro," (Génesis 24:43)
y ella me diga, "Beba, y también sacaré para sus camellos," que sea ella la mujer que el SEÑOR ha designado para el hijo de mi señor.' (Génesis 24:44)
Antes de que yo hubiera terminado de hablar en mi corazón, Rebeca salió con su cántaro al hombro, y bajó a la fuente y sacó agua, y yo le dije: 'Le ruego que me dé de beber.'
Y ella enseguida bajó el cántaro de su hombro, y dijo: 'Beba, y daré de beber también a sus camellos'; de modo que bebí, y ella dio de beber también a los camellos. (Génesis 24:46)
Entonces le pregunté: '¿De quién es hija?' Y ella contestó: 'Soy hija de Betuel, hijo de Nacor, que le dio a luz Milca'; y puse el anillo en su nariz, y los brazaletes en sus manos. (Génesis 24:47)
Y me postré y adoré al SEÑOR, y bendije al SEÑOR, Dios de mi señor Abraham, que me había guiado por camino verdadero para tomar la hija del pariente de mi señor para su hijo. (Génesis 24:48)

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Génesis 24:45 - Referencia Cruzada

Pidan, y se les dará; busquen, y hallarán; llamen, y se les abrirá. (Mateo 7:7)
Pero Ana hablaba en su corazón, sólo sus labios se movían y su voz no se oía. Elí, pues, pensó que estaba ebria. (1 Samuel 1:13)
Y Cornelio respondió: "Hace cuatro días, a esta misma hora, estaba yo orando en mi casa a la hora novena (3 p.m.); y un hombre con vestiduras resplandecientes, se puso delante de mí, (Hechos 10:30)
Al darse cuenta de esto, fue a la casa de María, la madre de Juan, llamado también Marcos, donde muchos estaban reunidos y oraban. (Hechos 12:12)
Y sucederá que antes que ellos clamen, Yo responderé; aún estarán hablando, y Yo habré oído. (Isaías 65:24)
¡Oh Señor, escucha! ¡Señor, perdona! ¡Señor, atiende y actúa! ¡No tardes, por amor de Ti mismo, Dios mío! Porque Tu nombre se invoca sobre Tu ciudad y sobre Tu pueblo." (Daniel 9:19)
Entonces invocarás, y el SEÑOR responderá; Clamarás, y El dirá: 'Aquí estoy.' Si quitas de en medio de ti el yugo, El amenazar con el dedo y el hablar iniquidad, (Isaías 58:9)
Y sucedió que antes de haber terminado de hablar, Rebeca, hija de Betuel, hijo de Milca, mujer de Nacor, hermano de Abraham, salió con el cántaro sobre su hombro. (Génesis 24:15)
Porque Tú, oh SEÑOR de los ejércitos, Dios de Israel, has revelado a Tu siervo, diciendo: 'Yo te edificaré casa;' por tanto, Tu siervo ha hallado ánimo para elevar esta oración a Ti. (2 Samuel 7:27)
Entonces el rey me dijo: "¿Qué es lo que pides?" Así que oré al Dios del cielo, (Nehemías 2:4)
Al principio de tus súplicas se dio la orden, y he venido para explicártela , porque eres muy estimado. Pon atención a la orden y entiende la visión. (Daniel 9:23)
Al oír ellos esto, unánimes alzaron la voz a Dios y dijeron: "Oh, Señor, Tú eres el que HICISTE EL CIELO Y LA TIERRA, EL MAR Y TODO LO QUE EN ELLOS HAY, (Hechos 4:24)
De la misma manera, también el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad. No sabemos orar como debiéramos, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles. (Romanos 8:26)