Nueva Biblia Latinoamericana
Y le preguntó: "¿De quién es hija? Dígame, le ruego, ¿hay en la casa de su padre lugar para hospedarnos?" (Génesis 24:23)
Ella le respondió: "Soy hija de Betuel, el hijo que Milca dio a Nacor." (Génesis 24:24)
También le dijo: "Tenemos suficiente paja y forraje, y lugar para hospedarse." (Génesis 24:25)
Entonces el hombre se postró y adoró al SEÑOR,
y dijo: "Bendito sea el SEÑOR, Dios de mi señor Abraham, que no ha dejado de mostrar Su misericordia y Su fidelidad hacia mi señor. El SEÑOR me ha guiado en el camino a la casa de los hermanos de mi señor." (Génesis 24:27)
La joven corrió y contó estas cosas a los de la casa de su madre. (Génesis 24:28)
Rebeca tenía un hermano que se llamaba Labán, y Labán salió corriendo hacia el hombre a la fuente. (Génesis 24:29)

Otras publicaciones relacionadas con "Génesis 24:26":

Dr. Roberto Miranda
Rebeca - una mujer de gran integridad o una maquinadora y mentirosa?
El pastor reflexiona sobre la historia de Rebeca en la Biblia y su papel en la dinámica familiar de Jacob y Esaú. Se discute su integridad y si fue una maquinadora o una mujer obediente a la voz de Dios. También se enfatiza la importancia de evitar el favoritismo en la familia y permanecer fieles a los principios de la Escritura. Se exhorta a los creyentes a vivir su vida con temor y temblor santo, conscientes de su llamado y papel en el cumplimiento de los propósitos de Dios.


Dr. Roberto Miranda
Vivir en tiempos de normalidad
En este sermón, el pastor habla sobre la historia de la Sunamita y la importancia de buscar a Dios con pasión y persistencia, así como de bendecir y apoyar a la iglesia. También se centra en el liderazgo espiritual de los hombres y la generosidad en la iglesia, y destaca la bendición que viene al preferir a Dios sobre todas las cosas.


Génesis 24:26 - Referencia Cruzada

Vengan, adoremos y postrémonos; Doblemos la rodilla ante el SEÑOR nuestro Hacedor. (Salmos 95:6)
Cuando el siervo de Abraham escuchó sus palabras, se postró en tierra delante del SEÑOR. (Génesis 24:52)
ustedes les dirán: 'Es un sacrificio de la Pascua al SEÑOR, el cual pasó de largo las casas de los Israelitas en Egipto cuando hirió a los Egipcios, y libró nuestras casas.'" Y el pueblo se postró y adoró. (Éxodo 12:27)
¿Con qué me presentaré al SEÑOR Y me postraré ante el Dios de lo alto? ¿Me presentaré delante de El con holocaustos, Con becerros de un año? (Miqueas 6:6)
Entonces David dijo a toda la asamblea: "Bendigan ahora al SEÑOR su Dios." Y toda la asamblea bendijo al SEÑOR, al Dios de sus padres, y se inclinaron y se postraron ante el SEÑOR y ante el rey. (1 Crónicas 29:20)
Moisés se apresuró a inclinarse a tierra y adoró, (Éxodo 34:8)
Todos los grandes de la tierra comerán y adorarán; Se postrarán ante El todos los que descienden al polvo, Aun aquél que no puede conservar viva su alma. (Salmos 22:29)
Y me postré y adoré al SEÑOR, y bendije al SEÑOR, Dios de mi señor Abraham, que me había guiado por camino verdadero para tomar la hija del pariente de mi señor para su hijo. (Génesis 24:48)
Toda la tierra Te adorará, Y cantará alabanzas a Ti, Cantará alabanzas a Tu nombre." (Selah) (Salmos 66:4)
para que al nombre de Jesús SE DOBLE TODA RODILLA de los que están en el cielo, y en la tierra, y debajo de la tierra, (Filipenses 2:10)
El pueblo creyó, y al oír que el SEÑOR había visitado a los Israelitas y había visto su aflicción, se postraron y adoraron. (Éxodo 4:31)
Entonces Josafat se inclinó rostro en tierra, y todo Judá y los habitantes de Jerusalén se postraron delante del SEÑOR, adorando al SEÑOR. (2 Crónicas 20:18)
El rey Ezequías y los oficiales ordenaron a los Levitas que cantaran alabanzas al SEÑOR con las palabras de David y del vidente Asaf. Cantaron alabanzas con alegría, y se inclinaron y adoraron. (2 Crónicas 29:30)
Entonces Abraham dijo a sus criados: "Quédense aquí con el asno. Yo y el muchacho iremos hasta allá, adoraremos y volveremos a ustedes." (Génesis 22:5)
Entonces Esdras bendijo al SEÑOR, el gran Dios. Y todo el pueblo respondió: "¡Amén, Amén!," mientras alzaban las manos. Después se postraron y adoraron al SEÑOR rostro en tierra. (Nehemías 8:6)
Dobléguense ante él los moradores del desierto, Y sus enemigos laman el polvo. (Salmos 72:9)