Pero al rey de Hai lo tomaron vivo, y lo trajeron a Josué.
(Josué 8:23)Cuando Israel acabó de matar a todos los habitantes de Hai en el campo y en el desierto, adonde ellos los habían perseguido y todos habían caído a filo de espada hasta ser exterminados, todo Israel volvió a Hai y la hirieron a filo de espada.
(Josué 8:24)El total de los que cayeron aquel día, tanto hombres como mujeres, fue de 12,000 todo el pueblo de Hai.
(Josué 8:25)Josué no retiró su mano con la cual tenía extendida la jabalina, hasta que hubo exterminado por completo a todos los habitantes de Hai.
Sólo el ganado y los despojos de aquella ciudad tomó Israel para sí como botín, conforme a la palabra que el SEÑOR había ordenado a Josué.
(Josué 8:27)Josué incendió la ciudad de Hai y la convirtió en un montón de ruinas para siempre, en una desolación hasta el día de hoy.
(Josué 8:28)También colgó al rey de Hai en un árbol hasta la tarde. A la puesta del sol Josué dio orden que bajaran su cadáver del árbol. Lo arrojaron a la entrada de la puerta de la ciudad y levantaron sobre él un gran montón de piedras que permanece hasta el día de hoy.
(Josué 8:29)Otras publicaciones relacionadas con "Josué 8:26":
Josué 8:26 - Referencia Cruzada
Y sucedía que mientras Moisés tenía en alto su mano, Israel prevalecía; y cuando dejaba caer la mano, prevalecía Amalec.
(Éxodo 17:11)Entonces el SEÑOR dijo a Josué: "Extiende la jabalina que está en tu mano hacia Hai, porque la entregaré en tu mano." Y Josué extendió hacia la ciudad la jabalina que estaba en su mano.
(Josué 8:18)