Después de tres días los oficiales pasaron por medio del campamento
(Josué 3:2)
y dieron órdenes al pueblo: "Cuando ustedes vean el arca del pacto del SEÑOR su Dios y a los sacerdotes Levitas llevándola, entonces saldrán de su lugar y la seguirán.
(Josué 3:3)
Sin embargo, dejarán entre ustedes y ella una distancia de unos 900 metros (2,000 codos). No se acerquen a ella para saber el camino por donde deben ir, porque no han pasado antes por este camino."
(Josué 3:4)
Entonces Josué dijo al pueblo: "Conságrense, porque mañana el SEÑOR hará maravillas entre ustedes."
Y Josué dijo a los sacerdotes: "Tomen el arca del pacto y pasen delante del pueblo." Y ellos tomaron el arca del pacto y fueron delante del pueblo.
(Josué 3:6)
El SEÑOR dijo a Josué: "Hoy comenzaré a exaltarte a los ojos de todo Israel, para que sepan que tal como estuve con Moisés, estaré contigo.
(Josué 3:7)
Además, darás órdenes a los sacerdotes que llevan el arca del pacto, diciéndoles: 'Cuando lleguen a la orilla de las aguas del Jordán, se detendrán en el Jordán.'"
(Josué 3:8)
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Josué 3:5 - Referencia Cruzada
Reúnan al pueblo, santifiquen la asamblea, Congreguen a los ancianos, Reúnan a los pequeños y a los niños de pecho. Salga el novio de su aposento Y la novia de su alcoba.
(Joel 2:16)
Porque Tú eres grande y haces maravillas; Sólo Tú eres Dios.
(Salmos 86:10)
Entonces Moisés dijo a Aarón: "Esto es lo que el SEÑOR dijo: 'Como santo seré tratado por los que se acercan a Mí, Y en presencia de todo el pueblo seré honrado.'" Y Aarón guardó silencio.
(Levítico 10:3)
Levántate, consagra al pueblo y di: 'Conságrense para mañana, porque así ha dicho el SEÑOR, Dios de Israel: "Hay anatema en medio de ti, oh Israel. No podrás hacer frente a tus enemigos hasta que quiten el anatema de en medio de ustedes."
(Josué 7:13)
Santifíquense, pues, y sean santos, porque Yo soy el SEÑOR su Dios.
(Levítico 20:7)
y cuando los que llevaban el arca entraron en el Jordán y los pies de los sacerdotes que llevaban el arca se mojaron en la orilla del agua (porque el Jordán se desborda por todas sus riberas todos los días de la cosecha),
(Josué 3:15)
Y él respondió: "En paz. He venido a ofrecer sacrificio al SEÑOR. Conságrense y vengan conmigo al sacrificio." Samuel consagró también a Isaí y a sus hijos y los invitó al sacrificio.
(1 Samuel 16:5)
Cuando Israel salió de Egipto, La casa de Jacob de entre un pueblo de lengua extraña,
(Salmos 114:1)
Y sucederá que cuando los sacerdotes que llevan el arca del SEÑOR, el Señor de toda la tierra, pongan las plantas de los pies en las aguas del Jordán, las aguas del Jordán quedarán cortadas, y las aguas que fluyen de arriba se detendrán en un montón."
(Josué 3:13)
Y por ellos Yo Me santifico, para que ellos también sean santificados en la verdad.
(Juan 17:19)
El pueblo iba, lo recogía y lo molía entre dos piedras de molino, o lo machacaba en el mortero, y lo hervía en el caldero y hacía tortas con él; y tenía el sabor de tortas cocidas con aceite.
(Números 11:8)
El SEÑOR dijo también a Moisés: "Ve al pueblo y conságralos hoy y mañana, y que laven sus vestidos.
(Éxodo 19:10)
Cuando los días del banquete habían pasado, Job enviaba a buscarlos y los santificaba, y levantándose temprano, ofrecía holocaustos conforme al número de todos ellos. Porque Job decía: "Quizá mis hijos hayan pecado y maldecido a Dios en sus corazones." Job siempre hacía así.
(Job 1:5)