Nueva Biblia Latinoamericana
Al fin de cada tercer año, sacarás todo el diezmo de tus productos de aquel año y lo depositarás en tus ciudades. (Deuteronomio 14:28)
Y vendrá el Levita, que no tiene parte ni herencia contigo, también el extranjero, el huérfano y la viuda que habitan en tus ciudades, y comerán y se saciarán, para que el SEÑOR tu Dios te bendiga en toda obra que tu mano haga. (Deuteronomio 14:29)
Al cabo de cada siete años harás remisión (perdón) de deudas . (Deuteronomio 15:1)
Así se hará la remisión (el perdón): todo acreedor hará remisión de lo que haya prestado a su prójimo; no lo exigirá de su prójimo ni de su hermano, porque se ha proclamado la remisión del SEÑOR.
De un extranjero lo puedes exigir, pero tu mano perdonará cualquier cosa tuya que tu hermano tenga. (Deuteronomio 15:3)
Sin embargo, no habrá menesteroso entre ustedes, ya que el SEÑOR de cierto te bendecirá en la tierra que el SEÑOR tu Dios te da por heredad para poseerla, (Deuteronomio 15:4)
si sólo escuchas fielmente la voz del SEÑOR tu Dios, para guardar cuidadosamente todo este mandamiento que te ordeno hoy. (Deuteronomio 15:5)

Otras publicaciones relacionadas con "Deuteronomio 15:2":

Dr. Roberto Miranda
Generosidad y gratitud
En este sermón, el pastor habla sobre la importancia de la generosidad y la gratitud en la vida de un creyente en Cristo, destacando la historia de David en Primera de Crónicas y la importancia de las ofrendas en la tradición del pueblo de Dios.


Dr. Roberto Miranda
Honra a Jehová con tus bienes
En este sermón se habla sobre la importancia de ser generosos con nuestros bienes y de honrar a Dios con nuestras posesiones. Se enfatiza que darle al Señor y a los demás no debe ser mecánico, sino que debe ser una actitud del corazón. Además, se destaca la importancia de darle al Señor lo primero y lo mejor de nuestros bienes, como lo hacían los agricultores con las primicias de sus cosechas.


Deuteronomio 15:2 - Referencia Cruzada

Y perdónanos nuestras deudas (ofensas, pecados), como también nosotros hemos perdonado a nuestros deudores (los que nos ofenden, nos hacen mal). (Mateo 6:12)
Porque si ustedes perdonan a los hombres sus transgresiones (faltas, delitos), también su Padre celestial les perdonará a ustedes. (Mateo 6:14)
Si prestan a aquéllos de quienes esperan recibir, ¿qué mérito tienen? También los pecadores prestan a los pecadores para recibir de ellos la misma cantidad. (Lucas 6:34)
Porque el juicio será sin misericordia para el que no ha mostrado misericordia. La misericordia triunfa sobre el juicio. (Santiago 2:13)
Se rebeló mi corazón dentro de mí, y reprendí a los nobles y a los oficiales y les dije: "Ustedes están cobrando en exceso cada uno a su hermano." Por tanto congregué contra ellos una gran asamblea. (Nehemías 5:7)
Pero no teniendo él con qué pagar, su señor ordenó que lo vendieran, junto con su mujer e hijos y todo cuanto poseía, y así pagara la deuda. (Mateo 18:25)
Dicen: '¿Por qué hemos ayunado, y Tú no lo ves? ¿Por qué nos hemos humillado, y Tú no haces caso?' Pero en el día de su ayuno buscan su conveniencia Y oprimen a todos sus trabajadores. (Isaías 58:3)
Oigan esto, los que pisotean a los menesterosos, y quieren exterminar a los pobres de la tierra, (Amós 8:4)
y no teniendo ellos con qué pagar, perdonó generosamente a los dos. ¿Cuál de ellos, entonces, lo amará más?" (Lucas 7:42)