Nueva Biblia Latinoamericana
El te humilló, y te dejó tener hambre, y te alimentó con el maná que tú no conocías, ni tus padres habían conocido, para hacerte entender que el hombre no sólo vive de pan, sino que vive de todo lo que procede de la boca del SEÑOR. (Deuteronomio 8:3)
Tu ropa no se gastó sobre ti, ni se hinchó tu pie durante estos cuarenta años. (Deuteronomio 8:4)
Por tanto, debes comprender en tu corazón que el SEÑOR tu Dios te estaba disciplinando, así como un hombre disciplina a su hijo. (Deuteronomio 8:5)
Guardarás, pues, los mandamientos del SEÑOR tu Dios, para andar en Sus caminos y para temerlo (reverenciarlo).
Porque el SEÑOR tu Dios te trae a una tierra buena, a una tierra de corrientes de aguas, de fuentes y manantiales que fluyen por valles y colinas; (Deuteronomio 8:7)
una tierra de trigo y cebada, de viñas, higueras y granados; una tierra de aceite de oliva y miel; (Deuteronomio 8:8)
una tierra donde comerás el pan sin escasez, donde nada te faltará; una tierra cuyas piedras son hierro, y de cuyos montes puedes sacar cobre. (Deuteronomio 8:9)

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Deuteronomio 8:6 - Referencia Cruzada

Ambos eran justos delante de Dios, y se conducían intachablemente en todos los mandamientos y preceptos del Señor. (Lucas 1:6)
Solamente teman al SEÑOR y sírvanle en verdad con todo su corazón; pues han visto cuán grandes cosas ha hecho por ustedes. (1 Samuel 12:24)
Entonces enséñales los estatutos y las leyes, y hazles saber el camino en que deben andar y la obra que han de realizar. (Éxodo 18:20)
Anden en todo el camino que el SEÑOR su Dios les ha mandado, a fin de que vivan y les vaya bien, y prolonguen sus días en la tierra que van a poseer. (Deuteronomio 5:33)
Cántico de ascenso gradual. Bienaventurado todo aquél que teme al SEÑOR, Que anda en Sus caminos. (Salmos 128:1)
para que Te teman (reverencien) y anden en Tus caminos todos los días que vivan sobre la superficie de la tierra que diste a nuestros padres. (2 Crónicas 6:31)