Nueva Biblia Latinoamericana
o si lo hirió con la mano en enemistad, y murió, al que lo hirió ciertamente se le dará muerte; es un asesino. El vengador de sangre dará muerte al asesino cuando se encuentre con él. (Números 35:21)
Pero si lo empujó súbitamente sin enemistad, o le arrojó algo sin acecharlo, (Números 35:22)
o tiró cualquier piedra que pudo matarlo, y sin ver que le cayó encima, murió, no siendo su enemigo ni procurando herirlo, (Números 35:23)
entonces la congregación juzgará entre el que mató y el vengador de la sangre conforme a estas ordenanzas.
La congregación librará al acusado de la mano del vengador de sangre, y la congregación lo restaurará a la ciudad de refugio a la cual huyó; y vivirá en ella hasta la muerte del sumo sacerdote que fue ungido con óleo santo. (Números 35:25)
Pero si el que causó la muerte del otro sale alguna vez de los límites de la ciudad de refugio a la cual pudo huir, (Números 35:26)
y el vengador de sangre lo encuentra fuera de los límites de la ciudad de refugio, y el vengador de sangre mata al acusado, no será culpable de sangre. (Números 35:27)

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Números 35:24 - Referencia Cruzada

Las ciudades serán para ustedes como refugio contra el vengador, para que el que haya matado a alguien no muera hasta que comparezca delante de la congregación para juicio. (Números 35:12)
Habitará en esa ciudad hasta que comparezca en juicio delante de la congregación, y hasta la muerte del que sea sumo sacerdote en aquellos días. Entonces el refugiado volverá a su ciudad y a su casa, a la ciudad de donde huyó.'" (Josué 20:6)