Y él le respondió: "¿No debo tener cuidado de hablar lo que el SEÑOR pone en mi boca?"
(Números 23:12)Entonces Balac le dijo: "Te ruego que vengas conmigo a otro sitio desde donde podrás verlos, aunque sólo verás el extremo de ellos, y no los verás a todos; y desde allí maldícemelos."
(Números 23:13)Lo llevó al campo de Zofim, sobre la cumbre del Pisga, y edificó siete altares y ofreció un novillo y un carnero en cada altar.
(Números 23:14)Y Balaam le dijo a Balac: "Ponte aquí junto a tu holocausto, mientras voy allá a encontrarme con el SEÑOR."
El SEÑOR salió al encuentro de Balaam y puso palabra en su boca y le dijo: "Vuelve a Balac y así hablarás."
(Números 23:16)Y él volvió a Balac, quien estaba de pie junto a su holocausto, y los jefes de Moab con él. Y Balac le preguntó: "¿Qué ha dicho el SEÑOR?"
(Números 23:17)Y comenzó su discurso (parábola), y dijo: "Levántate, Balac, y escucha; Dame oídos, hijo de Zipor.
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Números 23:15 - Referencia Cruzada
Y él les dijo: "Pasen la noche aquí y yo les traeré palabra según lo que el SEÑOR me diga." Y los jefes de Moab se quedaron con Balaam.
(Números 22:8)Luego Balaam dijo a Balac: "Ponte junto a tu holocausto, y yo iré; quizá el SEÑOR venga a mi encuentro, y lo que me manifieste te lo haré saber." Y se fue a un cerro sin vegetación.
(Números 23:3)