Nueva Biblia Latinoamericana
Y envió mensajeros a Balaam, hijo de Beor, en Petor, que está cerca del Río (Eufrates), en la tierra de los hijos de su pueblo, para llamarlo y le dijo: "Mira, un pueblo salió de Egipto y cubren la superficie de la tierra y habitan frente a mí. (Números 22:5)
Ven ahora, te ruego, y maldíceme a este pueblo porque es demasiado poderoso para mí; quizá pueda derrotarlos y echarlos de la tierra. Porque yo sé que a quien tú bendices es bendecido, y a quien tú maldices es maldecido." (Números 22:6)
Los ancianos de Moab y los ancianos de Madián fueron con el precio de la adivinación en la mano; y llegaron a Balaam, y le repitieron las palabras de Balac. (Números 22:7)
Y él les dijo: "Pasen la noche aquí y yo les traeré palabra según lo que el SEÑOR me diga." Y los jefes de Moab se quedaron con Balaam.
Entonces Dios vino a Balaam y le preguntó: "¿Quiénes son estos hombres que están contigo?" (Números 22:9)
Y Balaam respondió a Dios: "Balac, hijo de Zipor, rey de Moab, me ha enviado un mensaje: (Números 22:10)
Mira, el pueblo que salió de Egipto cubre la superficie de la tierra; ven ahora, maldícemelos; quizá yo pueda pelear contra ellos y expulsarlos.'" (Números 22:11)

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Números 22:8 - Referencia Cruzada

Y vienen a ti como viene el pueblo, y se sientan delante de ti como pueblo Mío, oyen tus palabras y no las cumplen sino que siguen los deseos sensuales expresados por su boca, y sus corazones andan tras sus ganancias. (Ezequiel 33:31)
El dijo: "Oigan ahora Mis palabras: Si entre ustedes hay profeta, Yo, el SEÑOR, me manifestaré a él en visión. Hablaré con él en sueños. (Números 12:6)
Tú los plantas, y echan raíces; Crecen, dan fruto. Cerca estás de sus labios, Pero lejos de su corazón. (Jeremías 12:2)
Pero, les ruego que permanezcan aquí también esta noche, y sabré que más me dice el SEÑOR." (Números 22:19)
Y él le respondió: "¿No debo tener cuidado de hablar lo que el SEÑOR pone en mi boca?" (Números 23:12)