Nueva Biblia Latinoamericana
Y se quedaron mucho tiempo con los discípulos. (Hechos 14:28)
Algunos que llegaron de Judea enseñaban a los hermanos: "Si no se circuncidan conforme al rito de Moisés, no pueden ser salvos." (Hechos 15:1)
Como Pablo y Bernabé tuvieran gran disensión y debate con ellos, los hermanos determinaron que Pablo y Bernabé, y algunos otros de ellos subieran a Jerusalén a los apóstoles y a los ancianos para tratar esta cuestión. (Hechos 15:2)
Así que, siendo enviados por la iglesia, pasaron por Fenicia y Samaria, relatando detalladamente la conversión de los Gentiles, y causaban gran gozo a todos los hermanos.
Cuando llegaron a Jerusalén, fueron recibidos por la iglesia, los apóstoles y los ancianos, e informaron de todo lo que Dios había hecho con ellos. (Hechos 15:4)
Pero algunos de la secta de los Fariseos que habían creído, se levantaron diciendo: "Es necesario circuncidarlos y mandarles que guarden la Ley de Moisés." (Hechos 15:5)
Entonces los apóstoles y los ancianos se reunieron para considerar este asunto. (Hechos 15:6)

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Hechos 15:3 - Referencia Cruzada

Pero era necesario hacer fiesta y regocijarnos, porque éste, tu hermano, estaba muerto y ha vuelto a la vida; estaba perdido y ha sido hallado.'" (Lucas 15:32)
Al encontrarla, la pone sobre sus hombros, gozoso. (Lucas 15:5)
Al tener noticia de nuestra llegada, los hermanos vinieron desde allá a recibirnos hasta el Foro de Apio y Las Tres Tabernas; y cuando Pablo los vio, dio gracias a Dios y cobró ánimo. (Hechos 28:15)
Levanta tus ojos en derredor y mira: Todos se reúnen, vienen a ti. Tus hijos vendrán de lejos, Y tus hijas serán llevadas en brazos. (Isaías 60:4)
Porque ellos dan testimonio de tu amor ante la iglesia. Harás bien en ayudarlos a proseguir su viaje de una manera digna de Dios. (3 Juan 1:6)
Encamina con diligencia a Zenas, intérprete de la ley, y a Apolos, para que nada les falte. (Tito 3:13)
Toda la multitud hizo silencio, y escuchaban a Bernabé y a Pablo, que relataban las señales (los milagros) y prodigios que Dios había hecho entre los Gentiles por medio de ellos. (Hechos 15:12)
Cuando llegaron y reunieron a la iglesia, informaron de todas las cosas que Dios había hecho con ellos, y cómo había abierto a los Gentiles la puerta de la fe. (Hechos 14:27)
Oyendo esto los Gentiles, se regocijaban y glorificaban la palabra del Señor; y creyeron cuantos estaban ordenados a vida eterna. (Hechos 13:48)
Y los discípulos estaban continuamente llenos de gozo y del Espíritu Santo. (Hechos 13:52)
Después de saludarlos, comenzó a referirles una por una las cosas que Dios había hecho entre los Gentiles mediante su ministerio. (Hechos 21:19)
Pasados aquellos días partimos y emprendimos nuestro viaje mientras que todos ellos, con sus mujeres e hijos, nos acompañaron hasta las afueras de la ciudad. Después de arrodillarnos y orar en la playa, nos despedimos unos de otros. (Hechos 21:5)
Cuando los apóstoles que estaban en Jerusalén oyeron que Samaria había recibido la palabra de Dios, les enviaron a Pedro y a Juan, (Hechos 8:14)
Y tal vez me quede con ustedes, o aun pase allí el invierno, para que me encaminen adonde haya de ir. (1 Corintios 16:6)
Por tanto, nadie lo menosprecie. Más bien, envíenlo en paz para que venga a mí, porque lo espero con los hermanos. (1 Corintios 16:11)
Porque así dice el SEÑOR: "Yo extiendo hacia ella paz como un río, Y la gloria de las naciones como torrente desbordado. Y ustedes mamarán, serán llevados sobre la cadera y acariciados sobre las rodillas. (Isaías 66:12)
es decir, quería visitarlos de paso a Macedonia, y de Macedonia ir de nuevo a ustedes y ser encaminado por ustedes en mi viaje a Judea. (2 Corintios 1:16)
Al oír esto se calmaron, y glorificaron a Dios, diciendo: "Así que también a los Gentiles ha concedido Dios el arrepentimiento que conduce a la vida." (Hechos 11:18)
cuando vaya a España los visitaré. Porque espero verlos al pasar y que me ayuden a continuar hacia allá, después de que haya disfrutado un poco de su compañía. (Romanos 15:24)
Traigan el becerro engordado, mátenlo, y comamos y regocijémonos; (Lucas 15:23)