Nueva Biblia Latinoamericana
Y viendo de pie junto a ellos al hombre que había sido sanado, no tenían nada que decir en contra. (Hechos 4:14)
Pero después de ordenarles que salieran fuera del Concilio (Sanedrín), deliberaban entre sí: (Hechos 4:15)
¿Qué haremos con estos hombres?" decían. "Porque el hecho de que un milagro (una señal) notable ha sido realizado por medio de ellos es evidente a todos los que viven en Jerusalén, y no podemos negarlo. (Hechos 4:16)
Pero a fin de que no se divulgue más entre el pueblo, vamos a amenazarlos para que no hablen más a ningún hombre en este nombre."
Cuando los llamaron, les ordenaron no hablar ni enseñar en el nombre de Jesús. (Hechos 4:18)
Pero Pedro y Juan, les contestaron: "Ustedes mismos juzguen si es justo delante de Dios obedecer a ustedes en vez de obedecer a Dios. (Hechos 4:19)
Porque nosotros no podemos dejar de decir lo que hemos visto y oído." (Hechos 4:20)

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Hechos 4:17 - Referencia Cruzada

Cuando oyeron estas palabras el capitán de la guardia del templo y los principales sacerdotes, se quedaron muy perplejos a causa de ellas, pensando en qué terminaría aquello. (Hechos 5:24)
Ahora ve, escríbelo en una tablilla delante de ellos Y grábalo en un rollo, Para que sirva en el día postrero Como testigo para siempre. (Isaías 30:8)
Cuando el sacerdote Pasur, hijo de Imer, que era el oficial principal en la casa del SEÑOR, oyó a Jeremías profetizar estas cosas, (Jeremías 20:1)
¿Por qué se sublevan las naciones, Y los pueblos traman cosas vanas? (Salmos 2:1)
Por eso, ordene usted que el sepulcro quede asegurado hasta el tercer día, no sea que vengan Sus discípulos, se Lo roben, y digan al pueblo: 'El ha resucitado de entre los muertos'; y el último engaño será peor que el primero." (Mateo 27:64)
Entonces se encendió la ira del SEÑOR contra Amasías, y le envió un profeta que le dijo: "¿Por qué has buscado a los dioses de otro pueblo que no pudieron librar a su propio pueblo de tu mano?" (2 Crónicas 25:15)
Ahora, Señor, considera sus amenazas, y permite que Tus siervos hablen Tu palabra con toda confianza, (Hechos 4:29)
Sin embargo, no todos hicieron caso al evangelio, porque Isaías dice: "SEÑOR, ¿QUIEN HA CREIDO A NUESTRO ANUNCIO?" (Romanos 10:16)
Así dice el SEÑOR de los ejércitos, el Dios de Israel: 'Por cuanto has enviado cartas en tu nombre a todo el pueblo que está en Jerusalén, y al sacerdote Sofonías, hijo de Maasías, y a todos los sacerdotes, diciéndole a Sofonías : (Jeremías 29:25)
Y después de amenazarlos otra vez, los dejaron ir, no hallando la manera de castigarlos por causa del pueblo, porque todos glorificaban a Dios por lo que había acontecido; (Hechos 4:21)
Estos mataron tanto al Señor Jesús como a los profetas, y a nosotros nos expulsaron, y no agradan a Dios sino que son contrarios a todos los hombres, (1 Tesalonicenses 2:15)
Pero ustedes hicieron beber vino a los Nazareos, Y a los profetas les ordenaron: 'No profeticen.' (Amós 2:12)
Porque saliendo de ustedes, la palabra del Señor se ha escuchado, no sólo en Macedonia y Acaya, sino que también por todas partes la fe de ustedes en Dios se ha divulgado, de modo que nosotros no tenemos necesidad de decir nada. (1 Tesalonicenses 1:8)
Entonces Amasías dijo a Amós: "Vete, vidente, huye a la tierra de Judá, come allí pan y allí profetiza. (Amós 7:12)
No profeticen' dicen, y profetizan. Aunque ellos (los profetas) no profeticen acerca de estas cosas, No serán retenidos los reproches. (Miqueas 2:6)
Porque no me atreveré a hablar de nada sino de lo que Cristo ha hecho por medio de mí para la obediencia de los Gentiles, en palabra y en obra, (Romanos 15:18)
Les dimos órdenes estrictas de no continuar enseñando en este Nombre, y han llenado a Jerusalén con sus enseñanzas, y quieren traer sobre nosotros la sangre de este Hombre." (Hechos 5:28)
Entonces dijeron los oficiales al rey: "Den muerte ahora a este hombre, porque él desanima a los hombres de guerra que quedan en esta ciudad y a todo el pueblo diciéndoles tales palabras. Este hombre no busca el bien de este pueblo, sino el mal." (Jeremías 38:4)
Entonces los principales sacerdotes y los Fariseos convocaron un concilio, y decían: "¿Qué hacemos? Porque este hombre hace muchas señales (muchos milagros). (Juan 11:47)
pero si es de Dios, no podrán destruirlos; no sea que se hallen luchando contra Dios." (Hechos 5:39)
La estuvo mirando hasta que una piedra fue cortada sin ayuda de manos, y golpeó la estatua en sus pies de hierro y de barro, y los desmenuzó. (Daniel 2:34)