Ya el segador recibe salario y recoge fruto para vida eterna, para que el que siembra se regocije junto con el que siega.
(Juan 4:36)
Porque en este caso el dicho es verdadero: 'Uno es el que siembra y otro el que siega.'
(Juan 4:37)
Yo los envié a ustedes a segar lo que no han trabajado; otros han trabajado y ustedes han entrado en su labor."
(Juan 4:38)
Y de aquella ciudad, muchos de los Samaritanos creyeron en El por la palabra de la mujer que daba testimonio, diciendo: "El me dijo todo lo que yo he hecho."
De modo que cuando los Samaritanos vinieron, rogaban a Jesús que se quedara con ellos; y El se quedó allí dos días.
(Juan 4:40)
Muchos más creyeron por Su palabra,
(Juan 4:41)
y decían a la mujer: "Ya no creemos por lo que tú has dicho, porque nosotros mismos Le hemos oído, y sabemos que Este es en verdad el Salvador del mundo."
(Juan 4:42)
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Juan 4:39 - Referencia Cruzada
Vengan, vean a un hombre que me ha dicho todo lo que yo he hecho. ¿No será éste el Cristo (el Mesías)?"
(Juan 4:29)
y decían a la mujer: "Ya no creemos por lo que tú has dicho, porque nosotros mismos Le hemos oído, y sabemos que Este es en verdad el Salvador del mundo."
(Juan 4:42)
Muchos vinieron a El y decían: "Aunque Juan no hizo ninguna señal, sin embargo, todo lo que Juan dijo de Este era verdad."
(Juan 10:41)
Llegó, pues, a una ciudad de Samaria llamada Sicar, cerca de la parcela de tierra que Jacob dio a su hijo José;
(Juan 4:5)
Por esto muchos de los Judíos que habían venido a ver a María, y vieron lo que Jesús había hecho, creyeron en El.
(Juan 11:45)