Nueva Biblia Latinoamericana
Y uno de ellos hirió al siervo del sumo sacerdote y le cortó la oreja derecha. (Lucas 22:50)
Pero Jesús dijo: "¡Deténganse! Basta de esto." Y tocando la oreja al siervo, lo sanó. (Lucas 22:51)
Entonces Jesús dijo a los principales sacerdotes, a los oficiales del templo y a los ancianos que habían venido contra El: "¿Como contra un ladrón han salido con espadas y palos? (Lucas 22:52)
Cuando estaba con ustedes cada día en el templo, no Me echaron mano; pero esta hora y el poder de las tinieblas son de ustedes."
Después de arrestar a Jesús, se Lo llevaron y Lo condujeron a la casa del sumo sacerdote; y Pedro los seguía de lejos. (Lucas 22:54)
Después que encendieron una hoguera en medio del patio, y de sentarse juntos, Pedro se sentó entre ellos. (Lucas 22:55)
Una sirvienta, al verlo sentado junto a la lumbre, fijándose en él detenidamente, dijo: "También éste estaba con El." (Lucas 22:56)

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Lucas 22:53 - Referencia Cruzada

Los Filisteos lo prendieron y le sacaron los ojos. Y llevándolo a Gaza, lo ataron con cadenas de bronce y lo pusieron a girar el molino en la prisión. (Jueces 16:21)
Jesús entró en el templo y echó fuera a todos los que compraban y vendían en el templo. También volcó las mesas de los que cambiaban el dinero y los asientos de los que vendían las palomas. (Mateo 21:12)
para que les abras sus ojos a fin de que se conviertan de las tinieblas a la luz, y del dominio de Satanás a Dios, para que reciban, por la fe en Mí, el perdón de pecados y herencia entre los que han sido santificados.' (Hechos 26:18)
Es breve el júbilo de los malvados, Y un instante dura la alegría del impío? (Job 20:5)
Procuraban, pues, prender a Jesús; pero nadie Le echó mano porque todavía no había llegado Su hora. (Juan 7:30)
En verdad les digo, que llorarán y se lamentarán, pero el mundo se alegrará; ustedes estarán tristes, pero su tristeza se convertirá en alegría. (Juan 16:20)
Porque El nos libró del dominio (de la autoridad) de las tinieblas y nos trasladó al reino de Su Hijo amado, (Colosenses 1:13)
Cuando Jesús llegó al templo, los principales sacerdotes y los ancianos del pueblo se acercaron a El mientras enseñaba, diciendo: "¿Con qué autoridad haces estas cosas, y quién Te dio esta autoridad?" (Mateo 21:23)
No hablaré mucho más con ustedes, porque viene el príncipe (gobernante) de este mundo, y él no tiene nada en Mí; (Juan 14:30)
Ahora Mi alma se ha angustiado; y ¿qué diré: 'Padre, sálvame de esta hora'? Pero para esto he llegado a esta hora. (Juan 12:27)
Durante el día Jesús enseñaba en el templo, pero al oscurecer salía y pasaba la noche en el monte llamado de los Olivos. (Lucas 21:37)
Entonces algunos de Jerusalén decían: "¿No es Este al que procuran matar? (Juan 7:25)
Y si todavía nuestro evangelio está velado, para los que se pierden está velado, (2 Corintios 4:3)
Al oír las parábolas de Jesús los principales sacerdotes y los Fariseos, comprendieron que El hablaba de ellos. (Mateo 21:45)
Porque nuestra lucha no es contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los poderes (gobernantes) de este mundo de tinieblas, contra las fuerzas espirituales de maldad en las regiones celestes. (Efesios 6:12)
Y fue arrojado el gran dragón, la serpiente antigua que se llama Diablo y Satanás, el cual engaña al mundo entero. Fue arrojado a la tierra y sus ángeles fueron arrojados con él. (Apocalipsis 12:9)
Entonces los guardias vinieron a los principales sacerdotes y Fariseos, y éstos les dijeron: "¿Por qué no Lo trajeron?" (Juan 7:45)