El intérprete de la ley respondió: "El que tuvo misericordia de él." "Ve y haz tú lo mismo," le dijo Jesús.
(Lucas 10:37)
Mientras iban ellos de camino, Jesús entró en cierta aldea; y una mujer llamada Marta Lo recibió en su casa.
(Lucas 10:38)
Ella tenía una hermana que se llamaba María, que sentada a los pies del Señor, escuchaba Su palabra.
(Lucas 10:39)
Pero Marta se preocupaba con todos los preparativos. Y acercándose a El, le dijo: "Señor, ¿no Te importa que mi hermana me deje servir sola? Dile, pues, que me ayude."
El Señor le respondió: "Marta, Marta, tú estás preocupada y molesta por tantas cosas;
(Lucas 10:41)
pero una sola cosa es necesaria, y María ha escogido la parte buena, la cual no le será quitada."
(Lucas 10:42)
Aconteció que estando Jesús orando en cierto lugar, cuando terminó, Le dijo uno de Sus discípulos: "Señor, enséñanos a orar, así como Juan enseñó también a sus discípulos."
(Lucas 11:1)
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Lucas 10:40 - Referencia Cruzada
Pero El, volviéndose, los reprendió, y dijo: "Ustedes no saben de qué espíritu son,
(Lucas 9:55)
Pero esto desagradó a Jonás en gran manera, y se enojó.
(Jonás 4:1)
Trabajen, no por el alimento que perece, sino por el alimento que permanece para vida eterna, el cual el Hijo del Hombre les dará, porque a El es a quien el Padre, Dios, ha marcado con Su sello."
(Juan 6:27)
Al atardecer se acercaron los discípulos, diciendo: "El lugar está desierto y la hora ya es avanzada; despide, pues, a las multitudes para que vayan a las aldeas y se compren alimentos."
(Mateo 14:15)
Cuando Sus parientes oyeron esto, fueron para hacerse cargo de El, porque decían: "Está fuera de sí."
(Marcus 3:21)
Tomando aparte a Jesús, Pedro Lo reprendió: "¡No lo permita Dios, Señor! Eso nunca Te acontecerá."
(Mateo 16:22)
Ustedes, pues no busquen qué han de comer, ni qué han de beber, y no estén preocupados.
(Lucas 12:29)