Nueva Biblia Latinoamericana
porque él ama a nuestro pueblo (nuestra nación) y fue él quien nos edificó la sinagoga." (Lucas 7:5)
Jesús iba con ellos, pero cuando ya no estaba lejos de la casa, el centurión envió a unos amigos, diciendo: "Señor, no te molestes más, porque no soy digno de que Tú entres bajo mi techo; (Lucas 7:6)
por eso ni siquiera me consideré digno de ir a Ti, tan sólo di la palabra y mi siervo será sanado. (Lucas 7:7)
Pues yo también soy hombre puesto bajo autoridad, y tengo soldados bajo mis órdenes; y digo a éste: 'Ve,' y va; y a otro: 'Ven,' y viene; y a mi siervo: 'Haz esto,' y lo hace."
Al oír esto, Jesús se maravilló de él, y volviéndose, dijo a la multitud que Lo seguía: "Les digo que ni aun en Israel he hallado una fe tan grande." (Lucas 7:9)
Cuando los que habían sido enviados regresaron a la casa, encontraron sano al siervo. (Lucas 7:10)
Aconteció poco después que Jesús fue a una ciudad llamada Naín; y Sus discípulos iban con El acompañados por una gran multitud. (Lucas 7:11)

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Lucas 7:8 - Referencia Cruzada

Después que se había ido el ángel que le hablaba, Cornelio llamó a dos de los criados y a un soldado piadoso de los que constantemente le servían. (Hechos 10:7)
Pablo, llamando a uno de los centuriones, dijo: "Lleva a este joven al comandante, porque tiene algo que informarle." (Hechos 23:17)
Siervos, obedezcan en todo a sus amos en la tierra, no para ser vistos, como los que quieren agradar a los hombres, sino con sinceridad de corazón, temiendo al Señor. (Colosenses 3:22)
Y dio órdenes al centurión de que tuviera a Pablo bajo custodia, pero con alguna medida de libertad, y que no impidiera a ninguno de sus amigos que lo sirvieran. (Hechos 24:23)
Sin embargo, no tengo nada definido sobre él para escribirle a mi señor. Por eso lo he traído ante ustedes, y especialmente ante ti, rey Agripa, para que después de que se le interrogue, yo tenga algo que escribir. (Hechos 25:26)
Todos los que están bajo yugo como esclavos, consideren a sus propios amos como dignos de todo honor, para que el nombre de Dios y nuestra doctrina no sean blasfemados. (1 Timoteo 6:1)
Cuando lo estiraron con correas, Pablo dijo al centurión que estaba allí: "¿Les es lícito azotar a un ciudadano Romano sin haberle hecho juicio?" (Hechos 22:25)
Y llamando a dos de los centuriones, dijo: "Preparen 200 soldados para las nueve de la noche, con setenta jinetes y 200 lanceros, para que vayan a Cesarea." (Hechos 23:23)
Claudio Lisias, al excelentísimo gobernador Félix: Salud. (Hechos 23:26)