King James Version
Then came she and worshipped him, saying, Lord, help me.(Mateo 15:25)
But he answered and said, It is not meet to take the children's bread, and to cast it to dogs.(Mateo 15:26)
And she said, Truth, Lord: yet the dogs eat of the crumbs which fall from their masters' table.(Mateo 15:27)
Then Jesus answered and said unto her, O woman, great is thy faith: be it unto thee even as thou wilt. And her daughter was made whole from that very hour.
And Jesus departed from thence, and came nigh unto the sea of Galilee; and went up into a mountain, and sat down there.(Mateo 15:29)
And great multitudes came unto him, having with them those that were lame, blind, dumb, maimed, and many others, and cast them down at Jesus' feet; and he healed them:(Mateo 15:30)
Insomuch that the multitude wondered, when they saw the dumb to speak, the maimed to be whole, the lame to walk, and the blind to see: and they glorified the God of Israel.(Mateo 15:31)

Otras publicaciones relacionadas con "Mateo 15:28":

Omar Soto
Fe persistente (Mateo 15)
En Mateo 15:21-28, se relata la historia de una mujer gentil que busca la ayuda de Jesús para sanar a su hija. A pesar de inicialmente negarse, la mujer persiste y demuestra una gran fe hasta que Jesús la reconoce y sana a su hija. La historia demuestra la importancia de la fe persistente y dejarla como una herencia para aquellos que vienen después de nosotros. Además, se destaca la importancia de la oración y el crecimiento espiritual en nuestra relación con Dios.


Dr. Roberto Miranda
Una fe persistente (Mateo 15)
En este artículo, el Dr. Roberto Miranda explora la historia de la fe persistente en Mateo 15 y cómo puede dejarnos una herencia completa. También se menciona la historia de Moisés como un ejemplo de fe persistente y cómo podemos renovar nuestra fe y aceptar a Jesús como nuestro salvador.


Dr. Roberto Miranda
Tenemos que salir de nuestra zona de comfort
El artículo habla sobre la historia de la mujer cirofenicia en la Biblia y cómo su fe y valentía cambiaron la agenda de Dios. También se destaca la importancia de persistir en la oración y usar argumentos legales para amarrar a Dios en nuestras peticiones. La historia demuestra que Dios puede responder a aquellos que claman a él, incluso si parecen estar lejos de su voluntad.


Dr. Roberto Miranda
Nuestra fe cambia la agenda del Señor
En esta meditación se destaca la importancia de la fe en la vida de las personas y cómo la fe puede hacer que Dios preste atención a nuestras necesidades. La mujer con el flujo de sangre se acerca a Jesús con gran desesperación y fe, lo que hace que se impregne en la agenda del Señor.


Dr. Roberto Miranda
Tu fe te ha salvado
En este artículo se habla de la importancia de la fe en la vida cristiana, a través del relato bíblico de la mujer con el flujo de sangre que fue sanada por Jesús debido a su fe. El autor destaca la necesidad de renovar la mente y tener perseverancia en la fe, así como buscar lugares y personas con buena energía para recibir fuerza y positividad. Se resalta la misericordia y generosidad de Dios y su capacidad para solucionar nuestros problemas.


Omar Soto
Una fe atrevida recibe su recompensa
El autor habla sobre la historia de la mujer que tocó el borde del manto de Jesús y su fe atrevida para alcanzarlo, y cómo esto puede aplicarse a la vida de los lectores. También habla sobre la gracia inusual de Dios y la necesidad de buscar a Jesús para recibir su respuesta y recompensa.


Dr. Roberto Miranda
Dios siempre está dispuesto a responder a nuestro clamor
En este artículo, el Dr. Roberto Miranda habla sobre cómo Dios siempre está dispuesto a responder a nuestras oraciones y cómo podemos llevar nuestra fe y confianza en Él al máximo nivel de intensidad. También se menciona el ejemplo de la mujer con flujo de sangre en Marcos 5 y cómo su iniciativa de fe desató el mover poderoso de Dios.


Dr. Roberto Miranda
Tenemos que poner de nuestra parte si queremos recibir algo del Señor
En este artículo, el Dr. Roberto Miranda reflexiona sobre la historia de la mujer impura que buscó la bendición de Jesucristo en la Biblia. Él destaca la importancia de poner de nuestra parte para recibir la bendición de Dios y cómo esto muestra el amor de Dios por aquellos que se esfuerzan y son valientes.


Dr. Roberto Miranda
Dios es el Dios de la gente atrevida
Este sermón habla sobre la importancia de la disciplina y la perseverancia en la vida cristiana y cómo Dios honra los pequeños gestos y esfuerzos que hacemos para servirle.


Dr. Roberto Miranda
Testificar de lo que Dios ha hecho
La historia de la mujer con flujo de sangre muestra el poder de Dios en Jesucristo. Testificar de lo que Dios ha hecho en nuestras vidas para inspirar a otros.


Dr. Roberto Miranda
Sermón clásico 6046: El mejor médico de todos
El autor habla sobre la importancia de buscar a Dios con pasión y entender que Él es soberano y sabe todas las cosas, enfocándose en la historia de la mujer con flujo de sangre. El pastor Roberto Miranda habla sobre la importancia de tener una relación íntima con Jesucristo y de confiar en Él para sanarnos en sus mensajes.


Dr. Roberto Miranda
Tenemos un Dios que se interesa en nosotros
En este artículo, el Dr. Roberto Miranda habla sobre cómo Dios se interesa por nosotros y quiere sanarnos en todas las áreas de nuestra vida, destacando la importancia de la oración detallada y exponer todos los detalles de nuestra situación a Dios.


Mateo 15:28 - Referencia Cruzada

He will fulfil the desire of them that fear him: he also will hear their cry, and will save them. (Salmos 145:19)
And being not weak in faith, he considered not his own body now dead, when he was about an hundred years old, neither yet the deadness of Sarah's womb: (Romanos 4:19)
But he knoweth the way that I take: when he hath tried me, I shall come forth as gold. (Job 23:10)
And immediately Jesus stretched forth his hand, and caught him, and said unto him, O thou of little faith, wherefore didst thou doubt? (Mateo 14:31)
When Jesus heard it, he marvelled, and said to them that followed, Verily I say unto you, I have not found so great faith, no, not in Israel. (Mateo 8:10)
We are bound to thank God always for you, brethren, as it is meet, because that your faith groweth exceedingly, and the charity of every one of you all toward each other aboundeth; (2 Tesalonicenses 1:3)
And the apostles said unto the Lord, Increase our faith. (Lucas 17:5)
And Jesus said unto him, Receive thy sight: thy faith hath saved thee. (Lucas 18:42)
And Jesus said unto the centurion, Go thy way; and as thou hast believed, so be it done unto thee. And his servant was healed in the selfsame hour. (Mateo 8:13)
When Jesus heard these things, he marvelled at him, and turned him about, and said unto the people that followed him, I say unto you, I have not found so great faith, no, not in Israel. (Lucas 7:9)
Wherefore the LORD God of Israel saith, I said indeed that thy house, and the house of thy father, should walk before me for ever: but now the LORD saith, Be it far from me; for them that honor me I will honor, and they that despise me shall be lightly esteemed. (1 Samuel 2:30)
Jesus said unto him, If thou canst believe, all things are possible to him that believeth. (Marcus 9:23)
But Jesus turned him about, and when he saw her, he said, Daughter, be of good comfort; thy faith hath made thee whole. And the woman was made whole from that hour. (Mateo 9:22)
But though he cause grief, yet will he have compassion according to the multitude of his mercies. (Lamentaciones 3:32)
Jesus saith unto him, Go thy way; thy son liveth. And the man believed the word that Jesus had spoken unto him, and he went his way. (Juan 4:50)
Then touched he their eyes, saying, According to your faith be it unto you. (Mateo 9:29)
And he said unto her, For this saying go thy way; the devil is gone out of thy daughter. (Marcus 7:29)
And he said to the woman, Thy faith hath saved thee; go in peace. (Lucas 7:50)
And he said unto her, Daughter, thy faith hath made thee whole; go in peace, and be whole of thy plague. (Marcus 5:34)
Though he slay me, yet will I trust in him: but I will maintain mine own ways before him. (Job 13:15)