Nueva Biblia Latinoamericana
¿Han entendido ustedes todas estas cosas?" "Sí," Le dijeron ellos. (Mateo 13:51)
Entonces Jesús les dijo: "Por eso todo escriba que se ha convertido en un discípulo del reino de los cielos es semejante al dueño de casa que saca de su tesoro cosas nuevas y cosas viejas." (Mateo 13:52)
Sucedió que cuando Jesús terminó estas parábolas, se fue de allí. (Mateo 13:53)
Y llegando a Su pueblo, les enseñaba en la sinagoga de ellos, de tal manera que se maravillaban y decían: "¿Dónde obtuvo Este tal sabiduría y estos poderes milagrosos?
¿No es Este el Hijo del carpintero? ¿No se llama Su madre María, y Sus hermanos Jacobo (Santiago), José, Simón y Judas? (Mateo 13:55)
¿No están todas Sus hermanas con nosotros? ¿Dónde, pues, obtuvo Este todas estas cosas?" (Mateo 13:56)
Y se escandalizaban a causa de El. Pero Jesús les dijo: "No hay profeta sin honra, sino en su propia tierra y en su casa." (Mateo 13:57)

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Mateo 13:54 - Referencia Cruzada

Jesús se marchó de allí y llegó a Su pueblo, y Sus discípulos Lo siguieron. (Marcus 6:1)
Al ver la confianza de Pedro y de Juan, y dándose cuenta de que eran hombres sin letras y sin preparación, se maravillaban, y reconocían que ellos habían estado con Jesús. (Hechos 4:13)
A lo Suyo vino, y los Suyos no Lo recibieron. (Juan 1:11)
Y Jesús iba por toda Galilea, enseñando en sus sinagogas, proclamando el evangelio (las buenas nuevas) del reino, y sanando toda enfermedad y toda dolencia en el pueblo. (Mateo 4:23)
Jesús llegó a Nazaret, donde había sido criado, y según Su costumbre, entró en la sinagoga el día de reposo, y se levantó a leer. (Lucas 4:16)
Hablaré de Tu nombre a mis hermanos; En medio de la congregación Te alabaré. (Salmos 22:22)
Entonces los Judíos se maravillaban, diciendo: "¿Cómo puede Este saber de letras sin haber estudiado?" (Juan 7:15)
He proclamado buenas nuevas de justicia en la gran congregación; No refrenaré mis labios, Oh SEÑOR, Tú lo sabes. (Salmos 40:9)
Cuando llegó, vivió en una ciudad llamada Nazaret, para que se cumpliera lo que fue dicho por medio de los profetas: "El será llamado Nazareno." (Mateo 2:23)
Cuando Jesús terminó estas palabras, las multitudes se admiraban de Su enseñanza; (Mateo 7:28)
Tres días después Pablo convocó a los principales de los Judíos, y cuando se reunieron, les dijo: "Hermanos, sin haber hecho yo nada contra nuestro pueblo ni contra las tradiciones de nuestros padres (de los antepasados), desde Jerusalén fui entregado preso en manos de los Romanos, (Hechos 28:17)
Entonces Pablo y Bernabé hablaron con valor y dijeron: "Era necesario que la palabra de Dios les fuera predicada primeramente a ustedes; pero ya que la rechazan y no se juzgan dignos de la vida eterna, así que ahora nos volvemos a los Gentiles. (Hechos 13:46)