y los echarán en el horno de fuego; allí será el llanto y el crujir de dientes.
(Mateo 13:42)
Entonces LOS JUSTOS RESPLANDECERAN COMO EL SOL en el reino de su Padre. El que tiene oídos, que oiga.
(Mateo 13:43)
El reino de los cielos es semejante a un tesoro escondido en el campo, que al encontrarlo un hombre, lo vuelve a esconder, y de alegría por ello, va, vende todo lo que tiene y compra aquel campo.
(Mateo 13:44)
El reino de los cielos también es semejante a un mercader que busca perlas finas,
y al encontrar una perla de gran valor, fue y vendió todo lo que tenía y la compró.
(Mateo 13:46)
El reino de los cielos también es semejante a una red barredera que se echó en el mar, y recogió peces de toda clase.
(Mateo 13:47)
Cuando se llenó, la sacaron a la playa; y se sentaron y recogieron los peces buenos en canastas, pero echaron fuera los malos.
(Mateo 13:48)
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Mateo 13:45 - Referencia Cruzada
Vanidad de vanidades," dice el Predicador, "todo es vanidad."
(Eclesiastés 12:8)
Conmigo están las riquezas y el honor, La fortuna duradera y la justicia.
(Proverbios 8:18)
Jesús les contó otra parábola: "El reino de los cielos puede compararse a un hombre que sembró buena semilla en su campo.
(Mateo 13:24)
Muchos dicen: "¿Quién nos mostrará el bien?" ¡Alza, oh SEÑOR, sobre nosotros la luz de Tu rostro!
(Salmos 4:6)
Dije de la risa: "Es locura;" y del placer: "¿Qué logra esto?"
(Eclesiastés 2:2)
Pues ¿qué provecho obtendrá un hombre si gana el mundo entero, pero pierde su alma? O ¿qué dará un hombre a cambio de su alma?
(Mateo 16:26)
Pero ellos no hicieron caso y se fueron: uno a su campo, otro a sus negocios,
(Mateo 22:5)
Bienaventurado el hombre que halla sabiduría Y el hombre que adquiere entendimiento.
(Proverbios 3:13)
Reciban mi instrucción y no la plata, Y conocimiento antes que el oro escogido,
(Proverbios 8:10)
Sí, como una sombra anda el hombre; Ciertamente en vano se afana; Acumula riquezas, y no sabe quién las recogerá.
(Salmos 39:6)
Coral y cristal ni se mencionen; La adquisición de la sabiduría es mejor que las perlas.
(Job 28:18)
La conclusión, cuando todo se ha oído, es ésta: Teme a Dios y guarda Sus mandamientos, Porque esto concierne a toda persona.
(Eclesiastés 12:13)