Nueva Biblia Latinoamericana
No hay remedio para tu quebranto, Tu herida es incurable. Todos los que oigan noticias de ti Batirán palmas sobre ti, Porque ¿sobre quién no pasó Constantemente tu maldad? (Nahúm 3:19)
Oráculo (Profecía) que tuvo en visión el profeta Habacuc. (Habacuc 1:1)
¿Hasta cuándo, oh SEÑOR, pediré ayuda, Y no escucharás? Clamo a Ti: "¡Violencia!" Sin embargo Tú no salvas? (Habacuc 1:2)
¿Por qué me haces ver la iniquidad, Y me haces mirar la opresión? La destrucción y la violencia están delante de mí, Hay rencilla y surge la discordia.
Por eso no se cumple la ley Y nunca prevalece la justicia (el derecho). Porque el impío asedia al justo; Por eso sale pervertida la justicia. (Habacuc 1:4)
¡Miren entre las naciones! ¡Observen! ¡Asómbrense, quédense atónitos! Porque haré una obra en sus días Que ustedes no la creerían si alguien se las contara. (Habacuc 1:5)
Porque voy a levantar a los Caldeos (Babilonios), Pueblo feroz e impetuoso, Que marcha por la anchura de la tierra Para apoderarse de moradas ajenas. (Habacuc 1:6)

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Habacuc 1:3 - Referencia Cruzada

Porque cada vez que hablo, grito; Proclamo: ¡Violencia, destrucción! Pues la palabra del SEÑOR ha venido a ser para mí Oprobio y escarnio cada día. (Jeremías 20:8)
Y tú, hijo de hombre, no temas; no les temas a ellos ni a sus palabras aunque haya contigo cardos y espinas y te sientes en escorpiones. No temas sus palabras ni te atemorices ante ellos, porque son una casa rebelde. (Ezequiel 2:6)
Para el director del coro; sobre una lira de ocho cuerdas. Salmo de David. Salva, SEÑOR, porque el piadoso deja de ser; Porque los fieles desaparecen de entre los hijos de los hombres. (Salmos 12:1)
Si ves la opresión del pobre y la negación del derecho y de la justicia en la provincia, no te sorprendas del hecho, porque un oficial vigila sobre otro oficial, y hay oficiales superiores sobre ellos. (Eclesiastés 5:8)
Miren, Yo los envío como ovejas en medio de lobos; por tanto, sean astutos como las serpientes e inocentes como las palomas. (Mateo 10:16)
¡Ay de mí!, porque soy Como los recogedores de frutos de verano, como los rebuscadores en la vendimia. No hay racimo de uvas que comer, Ni higo temprano que tanto deseo. (Miqueas 7:1)
Porque tuve envidia de los arrogantes Al ver la prosperidad de los impíos. (Salmos 73:3)
Confunde, Señor, divide sus lenguas, Porque he visto violencia y rencilla en la ciudad. (Salmos 55:9)
Quién me diera en el desierto Un albergue de caminantes, Para dejar a mi pueblo Y alejarme de ellos. Porque todos ellos son adúlteros, Una asamblea de traidores. (Jeremías 9:2)
(porque ese justo, por lo que veía y oía mientras vivía entre ellos, diariamente sentía su alma justa atormentada por las iniquidades de ellos). (2 Pedro 2:8)
¡Ay de mí, porque soy peregrino en Mesec, Y habito entre las tiendas de Cedar! (Salmos 120:5)
Entonces yo me volví y observé todas las opresiones que se cometen bajo el sol: Y vi las lágrimas de los oprimidos, Y no tenían quien los consolara; En mano de sus opresores estaba el poder, Y no tenían quien los consolara. (Eclesiastés 4:1)