¡Saqueen la plata! ¡Saqueen el oro! No hay límite a los tesoros, A las riquezas de toda clase de objetos codiciables.
(Nahúm 2:9)¡Vacía está! Sí, desolada y desierta. Los corazones se derriten y las rodillas tiemblan; Hay también angustia en todo el cuerpo, Y los rostros de todos han palidecido.
(Nahúm 2:10)¿Dónde está la guarida de los leones Y el lugar donde comen los leoncillos, Donde andaban el león, la leona y su cachorro, Sin que nada los asustara?
(Nahúm 2:11)El león desgarraba lo suficiente para sus cachorros, Mataba para sus leonas, Llenaba de presa sus cuevas Y de carne desgarrada sus guaridas.
Aquí estoy contra ti," declara el SEÑOR de los ejércitos. "Quemaré y reduciré a humo tus carros, la espada devorará tus leoncillos, arrancaré de la tierra tu presa, y no se oirá más la voz de tus mensajeros."
(Nahúm 2:13)¡Ay de la ciudad sanguinaria, Toda llena de mentira y de pillaje, Que nunca cesa en su rapiña!
(Nahúm 3:1)Chasquido de látigos, Ruido del crujir de ruedas, Galopar de caballos, Y saltar de carros;
(Nahúm 3:2)Otras publicaciones relacionadas con "Nahúm 2:12":
Nahúm 2:12 - Referencia Cruzada
Contra una nación impía la envío Y contra el pueblo de Mi furor la mandaré, Para que capture botín y tome despojos Y los pisotee como el lodo de las calles.
(Isaías 10:6)Como león que ansía despedazar, Como leoncillo que acecha en los escondites.
(Salmos 17:12)Me ha devorado y aplastado Nabucodonosor, rey de Babilonia, Me ha dejado como vaso vacío, Me ha tragado como un monstruo, Ha llenado su estómago de mis delicias, Me ha expulsado.
(Jeremías 51:34)