Nueva Biblia Latinoamericana
En cuanto al hierro mezclado con barro corriente que ha visto, se mezclarán mediante simiente humana. Pero no se unirán el uno con el otro, como no se mezcla el hierro con el barro. (Daniel 2:43)
En los días de estos reyes, el Dios del cielo levantará un reino que jamás será destruido, y este reino no será entregado a otro pueblo. Desmenuzará y pondrá fin a todos aquellos reinos, y él permanecerá para siempre, (Daniel 2:44)
tal como usted vio que una piedra fue cortada del monte sin ayuda de manos y que desmenuzó el hierro, el bronce, el barro, la plata y el oro. El gran Dios ha hecho saber al rey lo que sucederá en el futuro. Así, pues, el sueño es verdadero y la interpretación fiel." (Daniel 2:45)
Entonces el rey Nabucodonosor cayó sobre su rostro, se postró ante Daniel, y ordenó que le ofrecieran presentes e incienso.
El rey habló a Daniel, y le dijo: "En verdad que su Dios es Dios de dioses, Señor de reyes y revelador de misterios, ya que tú has podido revelar este misterio." (Daniel 2:47)
Entonces el rey engrandeció a Daniel y le dio muchos regalos espléndidos, y le hizo gobernador sobre toda la provincia de Babilonia y jefe supremo sobre todos los sabios de Babilonia. (Daniel 2:48)
Por solicitud de Daniel, el rey puso sobre la administración de la provincia de Babilonia a Sadrac, Mesac y a Abed Nego, mientras que Daniel quedó en la corte del rey. (Daniel 2:49)

Otras publicaciones relacionadas con "Daniel 2:46":

Samuel Acevedo
No tire la toalla!
Aprende a resistir en momentos difíciles tomando como ejemplo a Daniel en Babilonia y manteniendo la fe invencible en Dios.


Isaías Rivera
Vasos de honra
Este sermón se basa en la historia de Beltsazar y Daniel del libro de Daniel capítulo 5. El pastor enfatiza la importancia de mantenerse fieles a Dios y no deshonrar lo que Él nos ha dado, así como buscar a los vasos de honra en momentos de necesidad. También se destaca la relevancia de no vender lo que Dios nos ha dado por las cosas temporales del mundo.


Daniel 2:46 - Referencia Cruzada

para que puedan ofrecer sacrificios agradables al Dios del cielo y orar por la vida del rey y de sus hijos. (Esdras 6:10)
Entonces caí a sus pies para adorarlo. Y me dijo: "No hagas eso. Yo soy consiervo tuyo y de tus hermanos que poseen el testimonio de Jesús; adora a Dios. El testimonio de Jesús es el espíritu de la profecía." (Apocalipsis 19:10)
También dejaré en ruinas sus ciudades, desolaré sus santuarios y no oleré sus suaves aromas. (Levítico 26:31)
Ellos esperaban que comenzara a hincharse, o que súbitamente cayera muerto. Pero después de esperar por largo rato, y de no observar nada anormal en él, cambiaron de parecer y decían que Pablo era un dios. (Hechos 28:6)
Yo, Juan, soy el que oyó y vio estas cosas. Y cuando oí y vi, me postré para adorar a los pies del ángel que me mostró estas cosas. (Apocalipsis 22:8)
Cayó sobre su rostro a los pies de Jesús, y Le dio gracias; y éste era Samaritano. (Lucas 17:16)
Cuando Pedro iba a entrar, Cornelio salió a recibirlo, y postrándose a sus pies, lo adoró. (Hechos 10:25)
El sacerdote de Júpiter, cuyo templo estaba en las afueras de la ciudad, trajo toros y guirnaldas a las puertas, y quería ofrecer sacrificios junto con la multitud. (Hechos 14:13)
Y los veinticuatro ancianos que estaban sentados delante de Dios en sus tronos, se postraron sobre sus rostros y adoraron a Dios, (Apocalipsis 11:16)