Si prestas dinero a Mi pueblo, a los pobres entre ustedes, no serás usurero con él; no le cobrarás interés.
(Éxodo 22:25)
Si tomas en prenda el manto de tu prójimo, se lo devolverás antes de ponerse el sol,
(Éxodo 22:26)
porque es su único abrigo; es el vestido para su cuerpo. ¿En qué otra cosa dormirá? Y será que cuando él clame a Mí, Yo le oiré, porque soy clemente.
(Éxodo 22:27)
No maldecirás a Dios, ni maldecirás al príncipe de tu pueblo.
No demorarás la ofrenda de tu cosecha ni de tu vendimia. Me darás el primogénito de tus hijos.
(Éxodo 22:29)
Lo mismo harás con tus bueyes y con tus ovejas. Siete días estará con su madre, y al octavo día Me lo darás.
(Éxodo 22:30)
Ustedes serán hombres santos para Mí. No comerán carne despedazada por las fieras en el campo. A los perros la echarán.
(Éxodo 22:31)
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Éxodo 22:28 - Referencia Cruzada
Pero David dijo a Abisai: "No lo mates, pues, ¿quién puede extender su mano contra el ungido del SEÑOR y quedar sin castigo?"
(1 Samuel 26:9)
Salmo de David. Con todo mi corazón Te daré gracias; En presencia de los dioses Te cantaré alabanzas.
(Salmos 138:1)
Jesús les respondió: "¿No está escrito en su Ley: 'YO DIJE: SON DIOSES'?
(Juan 10:34)
Y Pablo dijo: "No sabía, hermanos, que él era el sumo sacerdote; porque escrito está: 'NO HABLARAS MAL DE UNA DE LAS AUTORIDADES DE TU PUEBLO.'"
(Hechos 23:5)
Recuérdales que estén sujetos a los gobernantes, a las autoridades; que sean obedientes, que estén preparados para toda buena obra.
(Tito 3:1)
Ni aun en tu recámara maldigas al rey, Ni en tus alcobas maldigas al rico, Porque un ave de los cielos llevará el rumor, Y un ser alado hará conocer el asunto.
(Eclesiastés 10:20)
Entonces Pablo le dijo: "¡Dios lo golpeará a usted, pared blanqueada! ¿Se sienta usted para juzgarme conforme a la Ley, y viola la Ley ordenando que me golpeen?"
(Hechos 23:3)
Por tanto, el que resiste a la autoridad, a lo ordenado por Dios se ha opuesto; y los que se han opuesto, recibirán condenación sobre sí mismos.
(Romanos 13:2)
Hoy han visto sus ojos que el SEÑOR lo ha puesto en mis manos en la cueva en este día; y algunos me dijeron que lo matara, pero mis ojos tuvieron piedad de usted, y dije: 'No extenderé mi mano contra mi rey, porque es el ungido del SEÑOR.'
(1 Samuel 24:10)
Honren a todos, amen a los hermanos, teman (reverencien) a Dios, honren al rey.
(1 Pedro 2:17)
No obstante, de la misma manera también estos hombres, soñando, contaminan su cuerpo, rechazan la autoridad, y blasfeman de las majestades angélicas.
(Judas 1:8)
Además, el que blasfeme el nombre del SEÑOR, ciertamente ha de morir; toda la congregación ciertamente lo apedreará. Tanto el extranjero como el nativo, cuando blasfeme el Nombre, ha de morir.
(Levítico 24:16)
especialmente a los que andan tras la carne en sus deseos corrompidos y desprecian la autoridad. Atrevidos y obstinados, no tiemblan cuando blasfeman de las majestades angélicas,
(2 Pedro 2:10)
Si no es hallado el ladrón, entonces el dueño de la casa se presentará ante los jueces, para determinar si él metió la mano en la propiedad de su vecino.
(Éxodo 22:8)
El que maldiga a su padre o a su madre, ciertamente morirá.
(Éxodo 21:17)
Salmo de Asaf. Dios ocupa Su lugar en Su congregación; El juzga en medio de los jueces.
(Salmos 82:1)
Y dijo a sus hombres: "El SEÑOR me guarde de hacer tal cosa contra mi rey, el ungido del SEÑOR, de extender contra él mi mano, porque es el ungido del SEÑOR."
(1 Samuel 24:6)
Por eso, que todo santo ore a Ti en el tiempo en que puedas ser hallado; Ciertamente, en la inundación de muchas aguas, no llegarán éstas a él.
(Salmos 32:6)