Nueva Biblia Latinoamericana
Sacaré de Jacob descendencia Y de Judá heredero de Mis montes. Mis escogidos la heredarán, Y Mis siervos morarán allí. (Isaías 65:9)
Sarón será pastizal (redil) para ovejas, Y el Valle de Acor para lugar de descanso de vacas, Para Mi pueblo que Me busca. (Isaías 65:10)
Pero ustedes que abandonan al SEÑOR, Que olvidan Mi santo monte, Que ponen mesa para el dios de la Fortuna, Y que preparan vino mezclado para el dios del Destino, (Isaías 65:11)
Yo los destinaré a la espada, Y todos ustedes se encorvarán para la matanza. Porque llamé, pero no respondieron, Hablé, pero no oyeron; Hicieron lo malo ante Mis ojos Y escogieron aquello que no me complacía."
Por tanto, así dice el Señor DIOS: "Ciertamente Mis siervos comerán, pero ustedes tendrán hambre. Mis siervos beberán, pero ustedes tendrán sed. Mis siervos se alegrarán, pero ustedes serán avergonzados; (Isaías 65:13)
Mis siervos darán gritos de júbilo con corazón alegre, Pero ustedes clamarán con corazón triste, Y con espíritu quebrantado gemirán. (Isaías 65:14)
Y dejarán su nombre como maldición a Mis escogidos. El Señor DIOS te matará, Pero Mis siervos serán llamados por otro nombre. (Isaías 65:15)

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Isaías 65:12 - Referencia Cruzada

Porque he llamado y han rehusado oír , He extendido mi mano y nadie ha hecho caso. (Proverbios 1:24)
Tus hombres caerán a espada, Y tus poderosos en batalla. (Isaías 3:25)
Y ahora, por cuanto han hecho todas estas obras," declara el SEÑOR, "y a pesar de que les hablé desde temprano y hablando sin cesar , no oyeron; los llamé, pero no respondieron. (Jeremías 7:13)
Y envió a sus siervos a llamar a los que habían sido invitados a las bodas, pero no quisieron venir. (Mateo 22:3)
Por tanto, así dice el SEÑOR: 'Ustedes no Me han obedecido, al no proclamar libertad cada uno a su hermano y cada uno a su prójimo. Por eso proclamo contra ustedes libertad,' declara el SEÑOR 'a la espada, a la pestilencia y al hambre; y haré de ustedes motivo de espanto para todos los reinos de la tierra. (Jeremías 34:17)
Entonces el rey se enfureció, y enviando sus ejércitos, destruyó a aquellos asesinos e incendió su ciudad. (Mateo 22:7)
El SEÑOR, Dios de sus padres, les envió palabra repetidas veces por Sus mensajeros, porque El tenía compasión de Su pueblo y de Su morada. (2 Crónicas 36:15)
Aquel día el SEÑOR castigará Con Su espada inflexible, grande y poderosa, A Leviatán (monstruo marino), serpiente huidiza, A Leviatán, serpiente tortuosa, Y matará al dragón que vive en el mar. (Isaías 27:1)
Pero ellos rehusaron escuchar y volvieron la espalda rebelde y se taparon los oídos para no oír. (Zacarías 7:11)
Y traeré sobre ustedes una espada que ejecutará venganza a causa del pacto; y cuando se reúnan en sus ciudades, enviaré pestilencia entre ustedes, para que sean entregados en manos del enemigo. (Levítico 26:25)
Porque Mis ojos están puestos sobre todos sus caminos, que no se Me ocultan, ni su iniquidad está encubierta a Mis ojos. (Jeremías 16:17)
O si Yo trajera la espada contra ese país, y dijera: 'Pase la espada por el país,' y extermino de él hombres y animales, (Ezequiel 14:17)
Lávense, límpiense, Quiten la maldad de sus obras de delante de Mis ojos. Cesen de hacer el mal. (Isaías 1:16)
Es un pueblo que de continuo Me provoca en Mi propio rostro, Sacrificando en huertos y quemando incienso sobre ladrillos; (Isaías 65:3)
Sólo queda encorvarse entre los cautivos O caer entre los muertos. Con todo eso, no se aparta Su ira, Y aún está Su mano extendida. (Isaías 10:4)
¿Por qué cuando vine no había nadie, Y cuando llamé no había quien respondiera? ¿Acaso es tan corta Mi mano que no puede rescatar, O no tengo poder para librar? Con Mi reprensión seco el mar, Convierto los ríos en desierto. Sus peces huelen mal por falta de agua, Mueren de sed. (Isaías 50:2)
Cuando se acercó el tiempo de la cosecha, envió sus siervos a los labradores para recibir sus frutos. (Mateo 21:34)
Por tanto, entrega sus hijos al hambre, Y abandónalos al poder de la espada. Que se queden sus mujeres sin hijos y viudas; Sean sus maridos asesinados, Sus jóvenes heridos a espada en la batalla. (Jeremías 18:21)
¿No son estas las palabras que el SEÑOR proclamó por medio de los antiguos profetas, cuando Jerusalén estaba habitada y próspera con sus ciudades a su alrededor, y el Neguev (región del sur) y la tierra baja estaban habitados?'" (Zacarías 7:7)
Afuera traerá duelo la espada, Y dentro el terror, Tanto al joven como a la virgen, Al niño de pecho como al hombre encanecido. (Deuteronomio 32:25)
Extenderé mi mano contra Judá Y contra todos los habitantes de Jerusalén. Exterminaré de este lugar al remanente de Baal Y los nombres de los ministros idólatras junto con sus sacerdotes. (Sofonías 1:4)
Pero cuando miro, no hay nadie, Y entre ellos no hay consejeros A quienes, si les pregunto, puedan responder. (Isaías 41:28)
El que mata un buey es como el que mata a un hombre, El que sacrifica un cordero como el que desnuca un perro, El que presenta ofrenda de cereal como el que ofrece sangre de cerdo, El que quema incienso como el que bendice a un ídolo. Como ellos han escogido sus propios caminos, Y su alma se deleita en sus abominaciones, (Isaías 66:3)
A lo Suyo vino, y los Suyos no Lo recibieron. (Juan 1:11)