Nueva Biblia Latinoamericana
Tal vez el SEÑOR tu Dios oirá las palabras del Rabsaces, a quien su señor, el rey de Asiria, ha enviado para injuriar al Dios vivo, y lo reprenderá por las palabras que el SEÑOR tu Dios ha oído. Eleva, pues, una oración por el remanente que aún queda.'" (Isaías 37:4)
Cuando llegaron los siervos del rey Ezequías ante Isaías, (Isaías 37:5)
éste les dijo: "Así dirán a su señor: 'Así dice el SEÑOR: "No temas por las palabras que has oído, con las que los siervos del rey de Asiria Me han blasfemado. (Isaías 37:6)
Voy a poner en él un espíritu, oirá un rumor y se volverá a su tierra; y en su tierra lo haré caer a espada."'"
Entonces el Rabsaces volvió y halló al rey de Asiria peleando contra Libna, pues había oído que el rey había partido de Laquis. (Isaías 37:8)
Y les oyó decir acerca de Tirhaca, rey de Cus (Etiopía): "Ha salido a pelear contra ti," y cuando lo oyó, Senaquerib envió mensajeros a Ezequías, diciendo: (Isaías 37:9)
Así dirán a Ezequías, rey de Judá: 'No te engañe tu Dios en quien tú confías, diciendo: "Jerusalén no será entregada en mano del rey de Asiria." (Isaías 37:10)

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Isaías 37:7 - Referencia Cruzada

Por eso el Señor, DIOS de los ejércitos, enviará una enfermedad extenuante entre sus robustos guerreros; Y debajo de su gloria encenderá una hoguera como fuego abrasador. (Isaías 10:16)
Y Su aliento como un torrente desbordado Que llega hasta el cuello, Para zarandear a las naciones en una zaranda de destrucción, Y poner la brida que conduce a la ruina en las mandíbulas de los pueblos. (Isaías 30:28)
Y salió el ángel del SEÑOR e hirió a 185,000 en el campamento de los Asirios. Cuando los demás se levantaron por la mañana, vieron que todos eran cadáveres. (Isaías 37:36)
Pero la multitud de tus enemigos será como polvo fino, Y la multitud de los crueles como paja que se va volando; Sucederá en un instante, de repente. (Isaías 29:5)
El Asirio caerá por espada, no de hombre, Y la espada no humana lo devorará. No escapará de la espada, Y sus jóvenes serán sometidos a trabajos forzados. (Isaías 31:8)
Y les oyó decir acerca de Tirhaca, rey de Cus (Etiopía): "Ha salido a pelear contra ti," y cuando lo oyó, Senaquerib envió mensajeros a Ezequías, diciendo: (Isaías 37:9)
Por el aliento de Dios perecen, Y por la explosión (el soplo) de Su ira son consumidos. (Job 4:9)
Antes que las ollas de ustedes puedan sentir el fuego de los espinos, Tanto los verdes como los que arden, los barrerá El con torbellino. (Salmos 58:9)
El SEÑOR envió un ángel que destruyó a todo guerrero valiente, comandante y capitán en el campamento del rey de Asiria. Así regresó avergonzado a su propia tierra. Y cuando entró al templo de su dios, algunos de sus propios hijos lo mataron allí a espada. (2 Crónicas 32:21)
Ruidos de espanto hay en sus oídos, Mientras está en paz, el destructor viene sobre él. (Job 15:21)
Ahora me levantaré," dice el SEÑOR "ahora seré exaltado, ahora seré ensalzado. (Isaías 33:10)
Porque el Señor había hecho que el ejército de los Arameos oyera estruendo de carros y ruido de caballos, el estruendo de un gran ejército, de modo que se dijeron el uno al otro: "Ciertamente el rey de Israel ha tomado a sueldo contra nosotros a los reyes de los Hititas y a los reyes de los Egipcios, para que vengan contra nosotros." (2 Reyes 7:6)
El Señor, DIOS de los ejércitos, Desgajará el ramaje con terrible crujido. Los árboles de gran altura serán cortados, Los más elevados serán abatidos. (Isaías 10:33)
Las naciones rugen como el rugido de muchas aguas, Pero El las reprenderá y huirán lejos. Serán perseguidas como la paja de los montes delante del viento, Y como polvo de torbellino delante del vendaval. (Isaías 17:13)