Busquen en el libro del SEÑOR, y lean: Ninguno de ellos faltará, Ninguno carecerá de su compañera. Porque Su boca lo ha mandado, Y Su Espíritu los ha reunido.
(Isaías 34:16)
El les ha echado suertes, Y Su mano les ha repartido la tierra con el cordel. La poseerán para siempre; De generación en generación morarán en ella.
(Isaías 34:17)
El desierto y el lugar desolado se alegrarán, Y se regocijará el Arabá y florecerá; Como el azafrán
(Isaías 35:1)
Florecerá copiosamente Y se regocijará en gran manera y gritará de júbilo. La gloria del Líbano le será dada, La majestad del Carmelo y de Sarón. Ellos verán la gloria del SEÑOR, La majestad de nuestro Dios.
Fortalezcan las manos débiles Y afiancen las rodillas vacilantes.
(Isaías 35:3)
Digan a los de corazón tímido: "Esfuércense, no teman, Pues su Dios viene con venganza; La retribución vendrá de Dios mismo, Mas El los salvará."
(Isaías 35:4)
Entonces se abrirán los ojos de los ciegos, Y los oídos de los sordos se destaparán.
(Isaías 35:5)
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Isaías 35:2 - Referencia Cruzada
El norte y el sur, Tú los creaste; El Tabor y el Hermón aclamarán con gozo a Tu nombre.
(Salmos 89:12)
Entonces Moisés dijo: "Te ruego que me muestres Tu gloria."
(Éxodo 33:18)
Destilan los pastos del desierto, Y los collados se adornan de alegría.
(Salmos 65:12)
Hasta que se derrame sobre nosotros el Espíritu desde lo alto, El desierto se convierta en campo fértil Y el campo fértil sea considerado como bosque.
(Isaías 32:15)
Pero Yo conozco sus obras y sus pensamientos. Llegará el tiempo de juntar a todas las naciones y lenguas, y vendrán y verán Mi gloria.
(Isaías 66:18)
Pues Dios, que dijo: "De las tinieblas resplandecerá la luz," es el que ha resplandecido en nuestros corazones, para iluminación del conocimiento de la gloria de Dios en el rostro de Cristo.
(2 Corintios 4:6)
Haré un pacto de paz con ellos y eliminaré de la tierra las bestias feroces, para que habiten seguros en el desierto y duerman en los bosques.
(Ezequiel 34:25)
Bendito sea Su glorioso nombre para siempre, Sea llena de Su gloria toda la tierra. Amén y amén.
(Salmos 72:19)
Padre, quiero que los que Me has dado, estén también conmigo donde Yo estoy, para que vean Mi gloria, la gloria que Me has dado; porque Me has amado desde antes de la fundación del mundo.
(Juan 17:24)
Y en aquel día se dirá: "Este es nuestro Dios a quien hemos esperado para que nos salvara. Este es el SEÑOR a quien hemos esperado; Regocijémonos y alegrémonos en su salvación."
(Isaías 25:9)
Los cielos proclaman Su justicia, Y todos los pueblos han visto Su gloria.
(Salmos 97:6)
Las naciones temerán el nombre del SEÑOR, Y todos los reyes de la tierra, Su gloria.
(Salmos 102:15)
Ruja el mar y cuanto contiene, El mundo y los que en él habitan.
(Salmos 98:7)
Y vuelve a decir: "REGOCIJENSE, GENTILES, CON SU PUEBLO."
(Romanos 15:10)
Tu cabeza se eleva como el Monte Carmelo, Y la cabellera suelta de tu cabeza es como hilos de púrpura; El rey se ha cautivado de tus trenzas.
(Cantares 7:5)
Pastorea a Tu pueblo con Tu cayado, El rebaño de Tu heredad, Que mora solo en el bosque, En medio de un campo fértil. Que se apacienten en Basán y Galaad Como en los días de antaño.
(Miqueas 7:14)
Ya el sol no será para ti luz del día, Ni el resplandor de la luna te alumbrará; Sino que tendrás al SEÑOR por luz eterna, Y a tu Dios por tu gloria.
(Isaías 60:19)
Los montes y todas las colinas; árboles frutales y todos los cedros;
(Salmos 148:9)
Entonces será revelada la gloria del SEÑOR, Y toda carne (toda persona) a una la verá, Pues la boca del SEÑOR ha hablado."
(Isaías 40:5)
Entonces los árboles del bosque cantarán con gozo delante del SEÑOR; Porque viene a juzgar la tierra.
(1 Crónicas 16:33)
La congregación (La multitud) de los que creyeron era de un corazón y un alma. Ninguno decía ser suyo lo que poseía, sino que todas las cosas eran de propiedad común.
(Hechos 4:32)
Y el uno al otro daba voces, diciendo: "Santo, Santo, Santo, es el SEÑOR de los ejércitos, Llena está toda la tierra de Su gloria."
(Isaías 6:3)
Vienen días," declara el SEÑOR "cuando el arador alcanzará al segador, Y el que pisa la uva al que siembra la semilla; Cuando destilarán vino dulce los montes, Y todas las colinas se derretirán.
(Amós 9:13)
¿Y cómo predicarán si no son enviados? Tal como está escrito: "¡CUAN HERMOSOS SON LOS PIES DE LOS QUE ANUNCIAN EL EVANGELIO DEL BIEN!"
(Romanos 10:15)
Desde Sion, perfección de hermosura, Dios ha resplandecido.
(Salmos 50:2)
Porque con alegría saldrán, Y con paz serán conducidos. Los montes y las colinas prorrumpirán en gritos de júbilo delante de ustedes, Y todos los árboles del campo aplaudirán.
(Isaías 55:12)
Efraín será como un valiente, Y se alegrará su corazón como por el vino; Sus hijos lo verán y se alegrarán, Y se regocijará su corazón en el SEÑOR.
(Zacarías 10:7)
Levántate, resplandece, porque ha llegado tu luz Y la gloria del SEÑOR ha amanecido sobre ti.
(Isaías 60:1)
Entonces todos los de tu pueblo serán justos. Para siempre poseerán la tierra, Vástago de Mi plantío, Obra de Mis manos, Para que Yo me glorifique.
(Isaías 60:21)
Esto dijo Isaías porque vio Su gloria, y habló de El.
(Juan 12:41)
Haya abundancia de grano en la tierra, en las cumbres de los montes; Su fruto se mecerá como los cedros del Líbano; Que los de la ciudad florezcan como la hierba de la tierra.
(Salmos 72:16)
En aquel día estará grabado en los cascabeles de los caballos: "SANTIDAD AL SEÑOR." Y serán las ollas en la casa del SEÑOR como los tazones delante del altar.
(Zacarías 14:20)
Pero todos nosotros, con el rostro descubierto, contemplando como en un espejo la gloria del Señor, estamos siendo transformados en la misma imagen de gloria en gloria, como por el Señor, el Espíritu.
(2 Corintios 3:18)
En aquel tiempo Me ocuparé De todos tus opresores. Salvaré a la coja Y recogeré a la desterrada, Y convertiré su vergüenza en alabanza y renombre En toda la tierra.
(Sofonías 3:19)
La ciudad no tiene necesidad de sol ni de luna que la iluminen, porque la gloria de Dios la ilumina, y el Cordero es su lumbrera.
(Apocalipsis 21:23)
Canten al SEÑOR un cántico nuevo, Canten Su alabanza desde los confines de la tierra, Los que descienden al mar y cuanto hay en él, Las islas y sus moradores.
(Isaías 42:10)
Alégrense los cielos y regocíjese la tierra; Ruja el mar y cuanto contiene;
(Salmos 96:11)
Griten de júbilo, cielos, y regocíjate, tierra. Prorrumpan, montes, en gritos de alegría, Porque el SEÑOR ha consolado a Su pueblo, Y de Sus afligidos tendrá compasión.
(Isaías 49:13)
La tierra está de duelo y desfallece, El Líbano está avergonzado y se marchita. Sarón es como una llanura desierta, Y pierden su follaje Basán y el Carmelo.
(Isaías 33:9)
Brotarán sus renuevos, Y será su esplendor como el del olivo, Y su fragancia como la de los cedros del Líbano.
(Oseas 14:6)
Pues la tierra se llenará Del conocimiento de la gloria del SEÑOR Como las aguas cubren el mar.
(Habacuc 2:14)
Para conceder que a los que lloran en Sion Se les dé diadema en vez de ceniza, Aceite de alegría en vez de luto, Manto de alabanza en vez de espíritu abatido; Para que sean llamados robles de justicia, Plantío del SEÑOR, para que El sea glorificado.
(Isaías 61:3)
La gloria del Líbano vendrá a ti, El ciprés, el olmo y el boj a una, Para hermosear el lugar de Mi santuario. Y Yo haré glorioso el lugar de Mis pies.
(Isaías 60:13)
Pondré en los desiertos el cedro, La acacia, el mirto y el olivo; Pondré en el lugar desolado el ciprés, Junto con el olmo y el boj,
(Isaías 41:19)
Así dice el SEÑOR: "Como cuando se encuentra vino nuevo en el racimo Y alguien dice: 'No lo destruyas, Porque en él hay bendición,' Así haré Yo por Mis siervos Para no destruirlos a todos.
(Isaías 65:8)