Y mamarás la leche de las naciones, Mamarás al pecho de los reyes. Entonces sabrás que Yo, el SEÑOR, soy tu Salvador Y tu Redentor, el Poderoso de Jacob.
(Isaías 60:16)
En vez de bronce, traeré oro, En vez de hierro, traeré plata, En vez de madera, bronce, Y en vez de piedras, hierro. Pondré como tus administradores la paz, Y como tus gobernantes la justicia.
(Isaías 60:17)
No se oirá hablar más de violencia en tu tierra, Ni de desolación, ni de destrucción dentro de tus límites; Sino que llamarás a tus murallas salvación y a tus puertas alabanza.
(Isaías 60:18)
Ya el sol no será para ti luz del día, Ni el resplandor de la luna te alumbrará; Sino que tendrás al SEÑOR por luz eterna, Y a tu Dios por tu gloria.
Nunca más se pondrá tu sol, Ni menguará tu luna, Porque tendrás al SEÑOR por luz eterna, Y se habrán acabado los días de tu luto.
(Isaías 60:20)
Entonces todos los de tu pueblo serán justos. Para siempre poseerán la tierra, Vástago de Mi plantío, Obra de Mis manos, Para que Yo me glorifique.
(Isaías 60:21)
El más pequeño llegará a ser un millar (una tribu), Y el más insignificante una nación poderosa. Yo, el SEÑOR, a su tiempo lo apresuraré.
(Isaías 60:22)
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Isaías 60:19 - Referencia Cruzada
Porque en Ti está la fuente de la vida; En Tu luz vemos la luz.
(Salmos 36:9)
Hijos de hombres, ¿hasta cuándo cambiarán mi honra en deshonra? ¿Hasta cuándo amarán la vanidad y buscarán la mentira? (Selah)
(Salmos 4:2)
La ciudad no tiene necesidad de sol ni de luna que la iluminen, porque la gloria de Dios la ilumina, y el Cordero es su lumbrera.
(Apocalipsis 21:23)
En Dios descansan mi salvación y mi gloria; La roca de mi fortaleza, mi refugio, está en Dios.
(Salmos 62:7)
Pero Tú, oh SEÑOR, eres escudo en derredor mío, Mi gloria, y el que levanta mi cabeza.
(Salmos 3:3)
LUZ DE REVELACION A LOS GENTILES, Y gloria de Tu pueblo Israel."
(Lucas 2:32)
Y ya no habrá más noche, y no tendrán necesidad de luz de lámpara ni de luz del sol, porque el Señor Dios los iluminará, y reinarán por los siglos de los siglos.
(Apocalipsis 22:5)
Porque Yo seré para ella,' declara el SEÑOR, 'una muralla de fuego en derredor, y gloria seré en medio de ella.'"
(Zacarías 2:5)