Nueva Biblia Latinoamericana
Entonces profanarás tus imágenes talladas recubiertas de plata, y tus imágenes fundidas revestidas de oro. Las esparcirás como cosa inmunda, y les dirás: "¡Fuera de aquí!" (Isaías 30:22)
Y El te dará lluvia para la semilla que siembres en la tierra, y el pan del producto de la tierra será rico y abundante. En aquel día tus ganados serán apacentados en espaciosos pastizales (praderas). (Isaías 30:23)
También los bueyes y los asnos que labran la tierra comerán forraje con sal, que ha sido aventado con pala y con bieldo. (Isaías 30:24)
Sobre todo monte alto y sobre toda colina elevada habrá arroyos de aguas perennes el día de la gran matanza, cuando caigan las torres.
La luz de la luna será como la luz del sol, y la luz del sol será siete veces mayor, como la luz de siete días, el día que el SEÑOR ponga una venda en la fractura de Su pueblo y cure la llaga que El ha causado. (Isaías 30:26)
Miren, el nombre del SEÑOR viene de lejos; Ardiente es Su ira, y denso es Su humo. Sus labios están llenos de indignación, Su lengua es como fuego consumidor, (Isaías 30:27)
Y Su aliento como un torrente desbordado Que llega hasta el cuello, Para zarandear a las naciones en una zaranda de destrucción, Y poner la brida que conduce a la ruina en las mandíbulas de los pueblos. (Isaías 30:28)

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Isaías 30:25 - Referencia Cruzada

Haré de ellos y de los alrededores de mi collado una bendición. Haré descender lluvias a su tiempo; serán lluvias de bendición. (Ezequiel 34:26)
Porque las armas de nuestra contienda no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas; (2 Corintios 10:4)
Después el ángel me mostró un río de agua de vida, resplandeciente como cristal, que salía del trono de Dios y del Cordero, (Apocalipsis 22:1)
El que cree en Mí, como ha dicho la Escritura: 'De lo más profundo de su ser brotarán ríos de agua viva.'" (Juan 7:38)
Todas tus fortalezas son higueras Cargadas de los primeros frutos; Si se sacuden, caen En la boca de quien las va a comer. (Nahúm 3:12)
Porque el enojo del SEÑOR es contra todas las naciones, Y Su furor contra todos sus ejércitos. Las ha destruido por completo, Las ha entregado a la matanza. (Isaías 34:2)
El cojo entonces saltará como un ciervo, Y la lengua del mudo gritará de júbilo, Porque aguas brotarán en el desierto Y arroyos en el Arabá. (Isaías 35:6)
Yo hago algo nuevo, Ahora acontece; ¿No lo perciben? Aun en los desiertos haré camino Y ríos en los lugares desolados. (Isaías 43:19)
Contra todos los montes encumbrados, Contra todos los collados elevados, (Isaías 2:14)
Abriré ríos en las alturas desoladas, Y manantiales en medio de los valles. Transformaré el desierto en estanque de aguas, Y la tierra seca en manantiales. (Isaías 41:18)
Y salió el ángel del SEÑOR e hirió a 185,000 en el campamento de los Asirios. Cuando los demás se levantaron por la mañana, vieron que todos eran cadáveres. (Isaías 37:36)
Las sacaré de los pueblos y las juntaré de las tierras; las traeré a su propia tierra, y las apacentaré en los montes de Israel, por las barrancas y por todos los lugares habitados del país. (Ezequiel 34:13)
En cuanto a ti, hijo de hombre, así dice el Señor DIOS: 'Dile a toda clase de ave y a toda bestia del campo: "Congréguense y vengan, júntense de todas partes al sacrificio que voy a preparar para ustedes, un gran sacrificio sobre los montes de Israel, y comerán carne y beberán sangre. (Ezequiel 39:17)
Así dice el Señor DIOS: "Yo también tomaré un renuevo de lo más alto de la copa del cedro y lo plantaré; arrancaré de la punta de sus renuevos uno tierno y lo plantaré en un monte alto y eminente. (Ezequiel 17:22)
¿Quién es éste que viene de Edom, De Bosra con vestiduras de colores brillantes; Este, majestuoso en Su ropaje, Que marcha en la plenitud de Su fuerza? Soy Yo que hablo en justicia, poderoso para salvar. (Isaías 63:1)
Oí entonces una gran voz que desde el templo decía a los siete ángeles: "Vayan y derramen en la tierra las siete copas del furor de Dios." (Apocalipsis 16:1)
Porque el palacio ha sido abandonado, hecha un desierto la populosa ciudad. Colina y atalaya se han convertido en cuevas para siempre, Un deleite para asnos monteses, un pasto para rebaños; (Isaías 32:14)
Porque derramaré agua sobre la tierra sedienta, Y torrentes sobre la tierra seca. Derramaré Mi Espíritu sobre tu posteridad, Y Mi bendición sobre tus descendientes. (Isaías 44:3)