La gloria de los jóvenes es su fuerza, Y la honra de los ancianos, sus canas.
(Proverbios 20:29)
Los azotes que hieren limpian del mal, Y los golpes llegan a lo más profundo del cuerpo.
(Proverbios 20:30)
Como canales de agua es el corazón del rey en la mano del SEÑOR; El lo dirige donde le place.
(Proverbios 21:1)
Todo camino del hombre es recto ante sus ojos, Pero el SEÑOR sondea los corazones.
El hacer justicia y derecho Es más deseado por el SEÑOR que el sacrificio.
(Proverbios 21:3)
Los ojos altivos y el corazón arrogante, Y la lámpara de los impíos son pecado.
(Proverbios 21:4)
Los proyectos del diligente ciertamente son ventaja, Pero todo el que se apresura, ciertamente llega a la pobreza.
(Proverbios 21:5)
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Proverbios 21:2 - Referencia Cruzada
Hay camino que al hombre le parece derecho, Pero al final es camino de muerte.
(Proverbios 16:25)
A sus hijos mataré con pestilencia, y todas las iglesias sabrán que Yo soy el que escudriña las mentes y los corazones, y les daré a cada uno según sus obras.
(Apocalipsis 2:23)
Muchos hombres proclaman su propia lealtad, Pero un hombre digno de confianza, ¿quién lo hallará?
(Proverbios 20:6)
Porque en sus propios ojos la transgresión le engaña En cuanto a descubrir su iniquidad y aborrecerla.
(Salmos 36:2)
Pero Jesús, en cambio, no se confiaba en ellos, porque los conocía a todos,
(Juan 2:24)
Sean hacedores de la palabra y no solamente oidores que se engañan a sí mismos.
(Santiago 1:22)
Pero el SEÑOR dijo a Samuel: "No mires a su apariencia, ni a lo alto de su estatura, porque lo he desechado; porque Dios no ve como el hombre ve, pues el hombre mira la apariencia exterior, pero el SEÑOR mira el corazón."
(1 Samuel 16:7)
Hay gente que se tiene por pura, Pero no está limpia de su inmundicia.
(Proverbios 30:12)
Y Jesús les dijo: "Ustedes son los que se justifican a sí mismos ante los hombres, pero Dios conoce sus corazones, porque lo que entre los hombres es de alta estima, abominable es delante de Dios.
(Lucas 16:15)
Todos los caminos del hombre son limpios ante sus propios ojos, Pero el SEÑOR sondea los espíritus.
(Proverbios 16:2)
El Fariseo puesto en pie, oraba para sí de esta manera: 'Dios, te doy gracias porque no soy como los demás hombres: estafadores, injustos, adúlteros; ni aun como este recaudador de impuestos.
(Lucas 18:11)
Porque si alguien se cree que es algo, no siendo nada, se engaña a sí mismo.
(Gálatas 6:3)
Yo, el SEÑOR, escudriño el corazón, Pruebo los pensamientos, Para dar a cada uno según sus caminos, Según el fruto de sus obras.
(Jeremías 17:10)
Si dices: "Mira, no sabíamos esto." ¿No lo tiene en cuenta el que sondea los corazones? ¿No lo sabe el que guarda tu alma? ¿No dará a cada hombre según su obra?
(Proverbios 24:12)